Cámara al Hombro: El drama de los agricultores en Perú
En la ciudad de Ica, sur de Perú, los agricultores ven peligrar su actividad, la cosecha del pallar, por la falta de agua y la mala distribución de este recurso.
Estas, al parecer, son las razones para que muchas personas se hayan visto obligadas a dejar sus tierras. Esto mientras una empresa estaría sacando provecho de esta situación. ¿Por dónde pasa la solución?
Junto al maíz blanco de Cuzco, el pisco y la cerámica de Chulucanas, el pallar de Ica es uno de los productos peruanos con denominación de origen. La legumbre es oriunda de esta ciudad, ubicada a 300 kilómetros al sur de Lima, capital de Perú, y sus vestigios datan de cinco mil años atrás.
El pallar es para los agricultores de la zona el principal sustento y un símbolo cultural. Sin embargo, la falta de agua, acelerada por la aridez del desierto iqueño y un desigual acceso al recurso, les ha hecho perder sus cultivos.
Los agricultores de esta zona atribuyen la sequía de sus campos a la intensa extracción de agua subterránea que hace Agrícola La Venta, empresa que exporta espárragos al exterior. Desde que se instaló en Ocucaje hace diez años, la agrícola empezó una vertiginosa expansión de tierras y obtuvo permisos extraordinarios de la Autoridad Nacional del Agua (ANA).
Mientras los agricultores de pallar han tenido que dejar sus tierras o perder sus cosechas, Agrícola La Venta ha obtenido en tiempo récord 23 licencias para hacer pozos, monopolizando a su favor el acceso al agua.
Hasta el año 2006, Ica producía el 85 % de la producción nacional del pallar, pero ese número ha decrecido tanto como el tamaño del cultivo. Presionados por la crisis, muchos campesinos vendieron sus parcelas a precios bajos, otros migraron a ciudades aledañas en busca de trabajo.
El control del agua en favor de Agrícola La Venta ha sido facilitado por las autoridades. En 2008, el Ministerio de Agricultura de Perú excluyó a Ocucaje de la zona de veda para la extracción de agua del subsuelo. La norma facilitó a la empresa formalizar 16 pozos.
El mismo beneficio le fue otorgado a la empresa Agrokasa del secretario general de Fuerza Popular, José Chlimper, que obtuvo 13 licencias en plena declaratoria de emergencia.
El especialista en geociencias James Apaéstegui confirma que la crisis acuífera se ha agudizado por la explotación subterránea.
A través del Instituto Científico del Agua (ICA), Apaéstegui y un grupo de expertos se ha propuesto diseñar un plan para frenar la inminente sequía en Ica. Por ahora, los estragos de esta crisis, propiciada por un manejo irresponsable de las autoridades y un acceso desigual al agua en favor de una gran empresa, está a punto de extinguir el emblemático pallar y con él la economía de todo un pueblo.
Rudy Jordán, Ocucaje.
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