• El presidente de EE.UU., Donald Trump, luego de ofrecer un discurso en un mitin electoral en Henderson, Nevada, 13 de septiembre de 2020.
Publicada: sábado, 3 de octubre de 2020 17:05

Con Trump contagiado del coronavirus, se plantean serias dudas sobre cómo se desarrollarán las elecciones presidenciales por el temor a que haya caos en EE.UU.

El diagnóstico positivo del presidente de EE.UU., Donald Trump, al nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, implica un giro sorprendente en medio de un año turbulento para la nación y proyecta gran incertidumbre de cara a las elecciones del próximo 3 de noviembre, así comienza un informe periodístico publicado el viernes por la cadena estadounidense CNN.

Es más aún la enfermedad de Trump plantea la grave posibilidad de haya más crisis en Estados Unidos por gobernanza y seguridad nacional, en un momento que ya de por sí es riesgoso, añade el informe

La preocupación más inmediata de la clase política estadounidense es, según el medio local, la salud del propio Trump, de 74 años y con sobrepeso, que eleva el riesgo de complicaciones por el virus de la COVID-19, ya que, precisa, su incapacidad para cumplir con sus funciones presidenciales puede afectar a la seguridad del país mismo si los enemigos de EE.UU. buscan sacar ventaja y explotar un posible vacío de liderazgo.

A esa coyuntura se suma una economía ya debilitada a causa de los estragos de la pandemia del coronavirus en el mercado estadounidense. De hecho, el artículo señala que los principales índices de las bolsas de valores de EE.UU. cayeron 400 puntos cuando se conoció la noticia de que el presidente y su esposa Melania dieron positivo al coronavirus.

 

Otro punto a considerar, explica el periódico es el temor a la debacle del sistema democrático que se rige en EE.UU., después de que el propio Trump no garantizara una transferencia pacífica del poder si llega a perder las próximas elecciones presidenciales ante su rival demócrata, Joe Biden.

El texto se plantea la pregunta de cómo se desarrollará de aquí a delante el proceso de la campaña electoral y, en consecuencia, las mismas elecciones presidenciales dado el diagnóstico de coronavirus de Trump, cuando solo falta un mes para su celebración.

El dirigente republicano no tendrá más remedio que retirarse de la campaña electoral durante un período prolongado, agrega la nota periodista, y subraya que el próximo debate presidencial está en el aire. El evento está programado para el 15 de octubre en Miami.

Aunque el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, dio negativo por el coronavirus el viernes, ha estado en contacto con los principales asesores del presidente y con Trump mismo en una Casa Blanca que ahora es un foco de la COVID-19. Por lo que también debe haber dudas sobre si su debate con la candidata demócrata a la vicepresidencia, Kamala Harris, se realizará este miércoles según lo planeado.

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