El profesor Nick Maynard, cirujano gastrointestinal residente en Oxford y actualmente en Gaza, dijo en una entrevista con BBC Radio 4 que el personal médico está observando “patrones claros de lesiones”, lo que indica que las tropas israelíes disparan deliberadamente a niños en la Franja de Gaza en diferentes partes del cuerpo según el día de la semana.
“Un día todas son heridas de bala abdominales, otro día en la cabeza o el cuello, y otro día en el brazo o la pierna”, declaró, según informó el jueves The Telegraph.
Conforme al médico, el patrón de las lesiones “es casi como si se estuviera jugando un juego”.
“Estos disparos provienen principalmente de los puntos de distribución [de ayuda] militarizados, donde civiles hambrientos intentan conseguir comida, pero luego denuncian haber sido atacados por soldados o cuadricópteros israelíes”, dijo, haciendo referencia a los puntos de recogida de ayuda alimentaria de la Fundación Humanitaria para Gaza, una organización estadounidense-israelí.
Puntos de reparto de alimentos, una “trampa mortal” para niños
Advirtió además que la población del enclave palestino sufre “niveles sin precedentes” de desnutrición severa como consecuencia del bloqueo total de ayuda impuesta por Israel, y denunció que las distribuciones de ayuda, que supuestamente debían frenar la hambruna, se han convertido en una “trampa mortal”, principalmente para niños y adolescentes.
“La desnutrición que veo aquí es indescriptiblemente grave. Es mucho peor ahora que hace un año”, detalló, alertando que la desnutrición severa contribuía directamente a muertes evitables entre los pacientes sometidos a cirugía.
Lamentó que en el hospital Nasser, en la sureña ciudad de Jan Yunis, cuatro bebés murieran recientemente por desnutrición en la sala de neonatos, y agregó que el complejo se había quedado casi sin líquidos intravenosos, utilizados para tratar a niños con desnutrición severa.
El cirujano británico advirtió que “miles de personas más” morirían en las próximas semanas si no se detiene la desnutrición forzada y los ataques deliberados israelíes contra civiles.
“El hecho de que el mundo permita que Israel se salga con la suya es profundamente preocupante; hay que hacer algo para detener este castigo colectivo a la población de Gaza”, dijo Maynard, calificando de “esencial que lleguen alimentos y ayuda adecuados a Gaza”.
Israel y Estados Unidos han sido criticados por los tiroteos casi diarios cerca de los centros de distribución de alimentos, que han matado a 875 palestinos, muchos de ellos menores, que buscaban comida desde mayo, según la oficina de derechos humanos de las Naciones Unidas.
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