El ex primer ministro iraquí Nuri al-Maliki (2006-2014) reaccionó el viernes a una caricatura blasfema publicada recientemente por el diario saudí Asharq Al-Awsat del ayatolá Sistani, considerando tal hecho como un intento de crear la sedición en Irak.
Al referirse a los esfuerzos del máximo clérigo chií para mantener la unidad en Irak, Al-Maliki sostuvo que Bagdad esperaba una cooperación por parte de sus vecinos en lugar de tales medidas en las circunstancias actuales y en medio de las crisis que enfrenta el país árabe, incluyendo el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.
“Despertar la sedición (...) en esta delicada situación en la que se encuentra nuestro país debido al brote del coronavirus y otras crisis es un acto de agresión y una flagrante violación” contra Irak, enfatizó.
Al-Maliki, quien también es secretario general del partido islámico Dawa, señaló que Arabia Saudí con esta caricatura ha violado todas las líneas rojas de Irak y ha insultado la identidad de los iraquíes.
El expremier iraquí condenó el comportamiento irresponsable de Arabia Saudí y, además, pidió al Gobierno de Bagdad que tome las medidas necesarias al respecto vía canales diplomáticos y legales.
A su vez, Hadi al-Ameri, líder de la coalición iraquí Al-Fath, denunció el viernes que la imagen subestima los sentimientos de millones de chiíes, suníes y cristianos iraquíes que son conscientes del papel del ayatolá Sistani en la preservación de la soberanía nacional del país ante el derrotado grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe).
La caricatura muestra la intención del régimen de los Al Saud de continuar sus planes y hostilidades sospechosas contra todos aquellos que buscan mantener la unidad de Irak, agregó.
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