El viernes, los miembros de la Liga Árabe —a excepción de El Líbano, Irak y Argelia—, votaron añadir oficialmente al Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) a una lista de organizaciones a las que consideran “terroristas”.
Al respecto, el diario argelino Al-Shoruq ha informado este domingo de que Nabil al-Arabi, secretario general de esta entidad, recibió un soborno de 2 millones de dólares para “facilitar” el proceso de toma de decisión.
De lo que ya estamos muy seguros es de que Arabia Saudí es un régimen terrorista que atenta contra el pueblo, el Ejército y la Resistencia libaneses mientras exhorta al régimen israelí a librar una guerra contra El Líbano”, afirma el jefe adjunto del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, el sheij Nabil Qauq.
La Liga Árabe declara a Hezbolá grupo “terrorista” https://t.co/Dj5QCkXfcI pic.twitter.com/wWHrysc3Qy
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La fuente agrega que la cantidad de dinero fue depositada en una cuenta bancaria de Al-Arabi ―cuyo mandato expira en poco tiempo― al menos 48 horas después de que la Liga Árabe colocara a Hezbolá entre los “grupos terroristas”.
La medida de la Liga se produce apenas 10 días después de que hiciera lo mismo el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), bloque de países árabes ribereños del Golfo Pérsico compuesto por Arabia Saudí, Baréin, Catar, los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Omán y Kuwait.
La República Islámica de Irán, Yemen, Túnez, Irak, Argelia y la oposición de Baréin, entre otros países y organizaciones regionales, han condenado en duros términos la designación como terrorista de Hezbolá, del que señalan la lucha constante contra las bandas terroristas activa en Siria y contra la ocupación israelí.
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En este contexto, la Cancillería siria ha asegurado que la iniciativa de las monarquías árabes lideradas por Riad está en línea con la postura de Israel, ya que este régimen, respaldado por sus aliados en algunos países occidentales, había considerado previamente “terroristas” a los líderes y combatientes de Hezbolá.
En un primer momento, el secretario general del Hezbolá, Seyed Hasan Nasrolá, cargó contra Arabia Saudí, que tras la suspensión de su apoyo militar a Beirut, “ha desencadenado una ola de ataques políticos y campañas propagandísticas” contra su país.
Este mismo domingo, el jefe adjunto del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, el sheij Nabil Qauq, ha reprochado a Riad sus “política proisraelí”, advirtiendo de que su “régimen terrorista” se ha convertido ya en “una gran amenaza” para la toda región de Oriente Medio.
“De lo que ya estamos muy seguros es de que Arabia Saudí es un régimen terrorista que atenta contra el pueblo, el Ejército y la Resistencia libaneses mientras exhorta al régimen israelí a librar una guerra contra El Líbano”, ha recalcado Qauq.
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