Así ha reaccionado el portavoz de la Cancillería de Irán, Bahram Qasemi, a las declaraciones de la portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Heather Nauert, quien dijo que su país responsabilizará a la República Islámica de cualquier ataque a los centros diplomáticos norteamericanos en Irak. El vocero iraní ha dicho que este tipo de acusaciones tienen como objetivo desatar una “guerra psicológica”.
“Con la repetición de acusaciones y afirmaciones sin pruebas y la puesta en marcha de una guerra psicológica sobre sus centros diplomáticos en Irak, actualmente, las autoridades estadounidenses recurren a tales propagandas ridículas y sospechosas con el fin de escapar de las consecuencias de sus propias medidas despreciables e imprudentes”, ha declarado este viernes Qasemi en una rueda de prensa.
Al respecto, el portavoz iraní ha criticado que la Administración estadounidense no pueda dejar de formular acusaciones infundadas en contra del país persa.
Con la repetición de acusaciones y afirmaciones sin pruebas y la puesta en marcha de una guerra psicológica sobre sus centros diplomáticos en Irak, actualmente, las autoridades estadounidenses recurren a tales propagandas ridículas y sospechosas con el fin de escapar de las consecuencias de sus propias medidas despreciables e imprudentes”, ha declarado el portavoz de la Cancillería de Irán, Bahram Qasemi.
En una conferencia de prensa celebrada el jueves, Nauert acusó a Irán de patrocinar a “agentes” que, a su juicio, realizaron el pasado 7 de septiembre varios ataques contra sus sedes diplomáticas en Basora y Bagdad en Irak, y dijo que Washington responsabiliza a Irán de “cualquier pérdida de vidas estadounidenses” en el país árabe.
Desde principios de septiembre, la provincia de Basora ha sido escenario de protestas sociales en las que se pide mejores condiciones de vida. En el curso de estas manifestaciones se han producido ataques a varias sedes de instituciones públicas y representaciones diplomáticas, incluido el consulado iraní.
Según Qasemi, todas las evidencias respecto al ataque al consulado iraní muestran que hubo una conspiración detrás del asalto para dañar las relaciones Teherán-Bagdad.
Asimismo, ha dicho que la nación y los partidos políticos iraquíes están conscientes del papel constructivo de Irán en la lucha contra el terrorismo y la violencia liderada por los países extraregionales y ciertos agentes en la región, por ello, ha añadido, nunca aceptarán propagandas infundadas de Estados Unidos.
Irán, a su vez, responsabiliza a EE.UU. por la inestabilidad en Irak y pide al país norteamericano rendir cuentas por apoyar a grupos que propagan la violencia y el extremismo en la región.
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