El informe anual, publicado conjuntamente por la Comisión Palestina de Asuntos de Detenidos, la Sociedad de Prisioneros Palestinos (PPS) y la organización Addameer, detalla cómo los prisioneros palestinos han muerto bajo “políticas sistemáticas severamente inhumanas”.
Según el informe conjunto, en 2025, 32 detenidos palestinos, incluido un niño, murieron bajo custodia israelí, lo que eleva el número total de muertes a 100 desde octubre de 2023, cuando comenzó la guerra genocida de Israel en Gaza.
El documento también señaló que 94 cadáveres siguen retenidos por las autoridades israelíes y reveló que decenas de detenidos en Gaza siguen desaparecidos por la fuerza.
Los grupos de derechos humanos dijeron que los últimos dos años han sido testigos de un “nivel sin precedentes de brutalidad y ejecución sistemática de prisioneros”, y que el número de muertos en este período es igual al número de palestinos muertos bajo custodia israelí durante los últimos 24 años.
“Estos hechos demuestran que lo que está sucediendo con los prisioneros palestinos es un genocidio sistemático”, subraya.
Según los hallazgos, los detenidos enfrentan tortura, inanición, negligencia médica, violencia sexual, aislamiento masivo y privación de necesidades humanas básicas.
“Etas instalaciones se han convertido en lugares de tortura, diseñados para quebrar física y mentalmente a los prisioneros mediante un sufrimiento prolongado y deliberado y políticas de ejecución lenta”, señala el informe.
El informe denuncia que “la intensidad de los crímenes y la brutalidad documentados durante dos años ha excedido todos los límites legales, violando leyes, normas y convenciones internacionales”.
También destacó las detenciones masivas que se están produciendo en toda la Cisjordania ocupada y la asediada Franja de Gaza.
Desde octubre de 2023, más de 21 000 palestinos han sido detenidos en Cisjordania y Al-Quds (Jerusalén), incluidos 1655 niños y 650 mujeres. Solo en 2025, se reportaron 7000 arrestos, incluidos 600 niños y 200 mujeres. Las cifras no incluyen los arrestos en Gaza.
Según el texto, los periodistas y el personal médico palestinos se encuentran entre los grupos más atacados.
Los grupos de derechos de los presos añadieron que las detenciones e interrogatorios a gran escala que se están llevando a cabo están acompañados de ejecuciones sistemáticas en el campo, palizas brutales, destrucción intencional generalizada de viviendas, saqueo, confiscación de vehículos, dinero y oro, uso de escudos humanos, así como terrorismo organizado y demoliciones de casas pertenecientes a familiares de detenidos palestinos.
En diciembre de 2025, se tenía documentado que más de 9300 palestinos están detenidos en cárceles israelíes, aunque es probable que la cifra real sea mayor, ya que Israel sigue ocultando información sobre cientos de personas secuestradas en Gaza.
El informe señaló que desde octubre de 2023, a las familias de los detenidos capturados en la Franja de Gaza se les ha negado cualquier información oficial sobre el paradero de sus familiares.
“La impunidad sistemática es central en el aparato de ocupación y refleja la complicidad judicial para encubrir crímenes contra prisioneros palestinos y reforzar políticas de apartheid y persecución”, añade el informe.
El Centro de Estudios sobre Detenidos de Palestina afirmó anteriormente que aproximadamente el 60 por ciento de los palestinos secuestrados ilegalmente en cárceles israelíes padecen enfermedades crónicas.
Un número significativo de personas han perdido la vida durante el encarcelamiento o poco después de su liberación, debido a la gravedad de sus condiciones médicas.
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