Las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, el ala militar del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), han anunciado este domingo en un comunicado que no podían comunicarse con dos israelíes, Omri Miran y Matan Angrest, debido a los brutales bombardeos del régimen israelí contra los barrios de Sabra y Tel al-Hawa, en la ciudad de Gaza.
Al-Qassam ha responsabilizado directamente al régimen ocupante por la vida de los cautivos y ha exigido que cesen los ataques aéreos durante 24 horas, a partir de las 18:00 de este domingo, además de la retirada inmediata de las fuerzas israelíes hacia el sur de la calle 8, para intentar rescatarlos de allí.
“La ocupación debe detener inmediatamente sus operaciones militares hasta que se intente evacuar a los prisioneros”, ha pedido el grupo palestino y concluido con la frase: “Quien advierte, queda exento de responsabilidad”.
El brazo militar de HAMAS también denuncia en su nota que las ofensivas israelíes de las últimas 48 horas han dejado un alto saldo de víctimas civiles y destrucción en zonas residenciales.
El 20 de septiembre, las Brigadas Al-Qassam difundieron una imagen de 46 prisioneros israelíes —algunos vivos y otros muertos— retenidos en la Franja de Gaza, con un mensaje que responsabilizaba directamente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por la suerte de los cautivos, debido a su intransigencia y a la continuación de la agresión contra el pueblo palestino.
Eso ocurre mientras que el ejército israelí ha aumentado sus agresiones contra la población palestina en el bloqueado enclave, declarando que continuará sus ataques “con una potencia e intensidad sin precedentes”.
Desde octubre de 2023, el ejército israelí ha matado a 66 005 palestinos, la mayoría de ellos mujeres y niños. Israel ha bombardeado tanto Gaza que la ha vuelto inhabitable, ha impuesto una hambruna y provocado la propagación de enfermedades.
mep/ncl/tmv