En un informe, el periódico estadounidense Wall Street Journal (WSJ) examinó los detalles del apoyo sin precedentes de Washington al régimen de Tel Aviv durante el ataque de represalia de Irán, tras la guerra de 12 días que le impuso Israel en junio.
Según el informe publicado el jueves, Estados Unidos no logró impedir el paso de misiles iraníes, a pesar de haber enviado dos avanzados sistemas de defensa antimisiles THAAD a la región de Asia Occidental [equivalentes a un tercio del arsenal mundial total de este sistema] .
Dan Shapiro, exfuncionario del Pentágono, calificó el despliegue de los sistemas THAAD como una muestra del “compromiso extraordinario” de Estados Unidos de utilizar su tecnología y su personal en favor de la seguridad de Israel.
Al respecto, WSJ reveló que, de los siete sistemas de defensa antimisiles THAAD que posee Estados Unidos, actualmente, cinco están desplegados fuera del país norteamericano.
Esta situación ha generado preocupación entre los comandantes estadounidenses debido a la falta de tiempo suficiente para que estos sistemas sean sometidos a reparaciones importantes, mantenimiento y capacitación del personal. Los expertos también señalaron que el costoso sistema de defensa estadounidense no funcionó como se esperaba, por lo que Washington se vio obligado a desplegar rápidamente sistemas de misiles Patriot para proteger al régimen sionista.
El Wall Street Journal destaca que el volumen de los ataques con misiles que lanzó Irán fue tan grande que los planificadores estadounidenses, incluso consideraron transferir misiles interceptores, encargados por Arabia Saudí, a los territorios ocupados.
Terry Fried, experto militar de la Universidad Johns Hopkins (EE.UU.), declaró a los medios que es muy difícil rastrear y destruir con precisión todos los misiles, y que los sistemas de defensa antimisiles suelen tener un rendimiento inferior en condiciones de guerra.
Apoyo a Israel le pasa factura a EEUU
De acuerdo al referido periódico, las fuerzas estadounidenses han disparado más de 150 misiles interceptores THAAD, lo que equivale aproximadamente al 25 % del arsenal total de este tipo de misiles del Pentágono.
WSJ estima que reemplazar solo los misiles THAAD costaría hasta 2000 millones de dólares, proceso que tardaría más de un año. También señaló que Lockheed Martin, el gigante estadounidense de defensa que fabrica el sistema, solo tiene capacidad para producir unos 100 misiles interceptores al año.
El informe reveló que, además de los misiles estadounidenses, las reservas de misiles del régimen israelí también disminuyen rápidamente. Las reservas de misiles Arrow, Honda de David y Cúpula de Hierro del régimen israelí estaban a punto de agotarse por completo por lo que tuvo que instar a Irán un alto el fuego.
“Si Irán hubiera disparado algunas oleadas más de misiles, Tel Aviv habría perdido por completo su reserva de misiles Arrow 3”, admitió un funcionario estadounidense.
La Armada de EE.UU. también disparó 80 misiles Standard-3. Cada uno de estos misiles cuesta entre 8 y 25 millones de dólares.
El Wall Street Journal informó que los destructores estadounidenses que no pudieron recargar misiles en el mar se vieron obligados a regresar a puerto en medio de la guerra.
Expertos militares han calificado la falla como una debilidad alarmante con consecuencias de gran alcance y han advertido que el sistema de defensa antimisiles del país no está preparado para una amplia gama de amenazas. “Otra preocupación es que Irán podría repetir tales ataques y no tendríamos la capacidad de contrarrestarlos”, declaró Tom Karako, del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington.
ctl