Según un informe publicado en el diario británico The Telegraph, la Marina Real (Royal Navy) británica ha enviado este domingo la fragata HMS Westminste al mar del Norte para rastrear la eventual presencia de los barcos y submarinos rusos que navegan en estas aguas.
“La región del norte y el Ártico es de vital importancia para la seguridad del Reino Unido, así como para algunos de nuestros aliados más cercanos en Escandinavia, la región del Báltico y el norte de Europa”, ha señalado esta misma jornada el ministro de las Fuerzas Armadas del Reino Unido, James Heappey, durante una entrevista con los medios locales.
De acuerdo con el funcionario británico, este despliegue muestra a los aliados y enemigos de Londres, que este país europeo saldrá en apoyo de la seguridad y la estabilidad de la región.
Tal y como ha indicado la fuente, un submarino de la Real Armada británica, cargado de armas nucleares, fue visto el 23 de diciembre saliendo de su base en Escocia, sin embargo, ha argumentado el diario, el submarino solo realizaba un ejercicio de entrenamiento y no fue un despliegue militar.
El Reino Unido hace este movimiento mientras escala la tensión entre Rusia y el Occidente. EE.UU. y El Reino Unido han amenazado a Moscú con graves consecuencias ante cualquier acción agresiva contra Ucrania. En los últimos meses, la tensión se ha disparado con acusaciones mutuas entre Kiev y Moscú de movilización de tropas y preparativos para una posible ofensiva.
Rusia enfatiza que sus movimientos militares en su suelo, en concreto en la frontera cerca de Ucrania, responden a la necesidad de defenderse ante las amenazas que plantea la gruesa presencia de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) en zonas ucranianas que lindan con el territorio ruso.
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