El Gobierno de Estados Unidos ha hecho público el informe de los servicios de Inteligencia del país que apunta al príncipe heredero de Arabia Saudí, Muhamad bin Salman Al Saud, como el cerebro de la operación para asesinar al periodista Jamal Khashoggi, asfixiado y luego desmembrado el 2 de octubre de 2018 en el consulado saudí en la ciudad turca de Estambul.
“Consideramos que el príncipe heredero de Arabia Saudí, Muhamad bin Salman, aprobó una operación en Estambul (Turquía) para capturar o matar al periodista saudí Jamal Khashoggi”, recoge el informe divulgado este viernes de forma parcial por la Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden.
El informe señala que, dada la influencia del príncipe heredero, es “altamente improbable” que el asesinato del periodista ocurriera sin su venia.
“El príncipe heredero ve a Khashoggi como una amenaza para el reino y en términos generales apoyó el uso de medidas violentas para silenciarlo”, agrega.
Tras la desclasificación de este informe, Estados Unidos ha anunciado sanciones contra 76 saudíes vinculados al asesinato de Khashoggi, y ha declarado que prohibirá el ingreso de personas que amenacen a disidentes en sus países.
“Hemos dejado claro que las amenazas extraterritoriales y los ataques de Arabia Saudí contra activistas, disidentes y periodistas tienen que terminar. No van a ser tolerados por Estados Unidos”, ha indicado el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, en un comunicado.
La Administración de Biden ha entregado el informe, fundamentado en un documento de máximo secreto de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en ingles) de EE.UU., al Congreso, después de que el líder demócrata hiciera saber de su decisión mediante una conversación telefónica mantenida el jueves con el rey saudí, Salman bin Abdelaziz Al Saud, quien ya pidió al presidente estadounidense que se abstenga de publicar el informe confidencial, según informó el 21 de febrero el diario kuwaití Al-Watanpress, citando a fuentes conocedoras del caso.
La cadena de televisión NBC ha considerado que la divulgación del informe marcará un nuevo capítulo en las relaciones Washington-Riad, aliados de vieja data. El expresidente de EE.UU. Donald Trump hizo todo lo posible por eximir a Bin Salman.
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