El diario norteamericano The New York Times, en un artículo publicado el lunes, enfatiza que es “difícil” percibir una estrategia que cumpla con los objetivos de la Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, de “renegociar” el acuerdo nuclear, del que salió EE.UU. en mayo de 2018, o frenar lo que llama la influencia de Irán en la región.
A Trump le gusta llamar a Irán “un país diferente”, y las protestas desatadas en el país persa en los últimos 18 meses de sanciones, podrían insinuar que él tiene razón. La publicación enfatiza que incluso las personas, muy críticas con las medidas de Trump, reconocen que su política de “máxima presión” contribuyó a los disturbios en el país, pero ¿hay algo más?
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“Las sanciones podrían haber impulsado las protestas en Irán, pero no han alcanzado los objetivos de EE.UU. (…) No hay nada claro, si lo que se ha desarrollado en las calles presionará a Irán a renegociar el acuerdo nuclear o poner fin a su conducta (...) en la región, dos objetivos principales de EE.UU. ante el país”, se lee en el artículo.
Las sanciones podrían haber impulsado las protestas en Irán, pero no han alcanzado los objetivos de EE.UU. (…) No hay nada claro, si lo que se ha desarrollado en las calles presionará a Irán a renegociar el acuerdo nuclear o poner fin a su conducta (...) en la región, dos objetivos principales de EE.UU. ante el país”, se lee en un artículo del diario norteamericano The New York Times.
En alusión a las declaraciones del secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, hechas la misma jornada del lunes al programa televisivo Fox & Friends, en las que reiteró el apoyo de Washington a los disturbios por el aumento del precios de combustible en Irán, la publicación alerta que expresar tal apoyo recuerda a un golpe, identificado en los archivos de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. como “Operación Ajax”, que consistió en un plan conjunto del Reino Unido y EE.UU. para sacar del poder al premier iraní Mohamad Mosadeq (1951-1953) por haber nacionalizado la industria petrolera.
“Contrario a los estadounidenses, los iraníes no han olvidado el escenario”, se lee en el artículo, que comparte el mismo punto de vista con distintos analistas. José Antonio Egido, experto en temas internacionales, indicó el 27 de noviembre a HispanTV que el pueblo iraní recuerda bien el comportamiento criminal de EE.UU., por eso, muestra unidad y apoyo al Gobierno tras los recientes disturbios.
Aunque EE.UU. encabeza la lista de países occidentales que han apoyado los disturbios, Francia, Alemania y el Reino Unido, entre otros Estados europeos, han jugado y juegan un papel transcendental en la implementación del “terrorismo económico” para complicar aún más la situación económica de los iraníes y llevarlos a las calles.
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De hecho, los socios europeos del acuerdo nuclear alcanzado en 2015 por Irán y el Grupo 5+1 (entonces integrado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) permanecen de brazos cruzados mientras Irán no recibe los beneficios conforme prometió el pacto.
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