El comandante en jefe adjunto del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general de brigada Ali Fadavi, ha destacado este martes la preparación para el combate de las Fuerzas Armadas del país en una entrevista con la cadena yemení Al-Masirah.
“Las Fuerzas Armadas de Irán vigilan y monitorean minuciosamente los movimientos del enemigo, y en caso de que cometan una nueva estupidez, tienen varias sorpresas preparadas”, ha alertado, haciendo referencia al régimen israelí que bombardeó las instalaciones militares, nucleares y civiles iraníes el mes pasado con el apoyo de Estados Unidos.
El general Fadavi ha dicho que desde la victoria de la Revolución Islámica (1979) los enemigos han urdido muchos complots contra la República Islámica para lograr sus objetivos, pero “siempre han fracasado y seguirán fracasando”.
Ha señalado que la victoria será del “frente de la verdad”, asegurando que las intrigas de los enemigos no llevarán a ninguna parte.
Verdadera Promesa III, una sorpresa estratégica para el enemigo
Por su parte, el jefe adjunto del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Irán, el general de brigada Mohamad Reza Ashtiani, ha resaltado la respuesta militar de la República Islámica a la agresión israelí, denominada ‘Verdadera Promesa III’, diciendo que la ofensiva representó “una sorpresa estratégica para el enemigo”.
“Las Fuerzas Armadas de Irán respondieron con contundencia, contrarrestando los cálculos erróneos del enemigo y dejándolos en un estado de conmoción y asombro”, ha agregado el general Ashtiani en una entrevista exclusiva con Al-Masirah.
El 13 de junio, Israel lanzó una agresión sin motivo alguno contra Irán, en flagrante violación del derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP). La ofensiva apuntó objetivos selectivos e indiscriminados, por lo que fueron martirizados numerosos comandantes militares de alto rango, científicos nucleares y civiles inocentes.
Casi una semana después, Estados Unidos se sumó al conflicto, bombardeando tres instalaciones nucleares iraníes, en un supuesto intento de impedir el desarrollo del programa nuclear pacífico iraní.
En respuesta, las Fuerzas Armadas iraníes atacaron con cientos de misiles y drones sitios estratégicos en los territorios ocupados, así como la base aérea de Al-Udeid en Catar, la mayor base militar estadounidense en Asia Occidental.
El 24 de junio, Irán, mediante sus exitosas operaciones de represalia contra el régimen israelí y Estados Unidos, logró detener el asalto ilegal, imponiendo un alto el fuego a los agresores.
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