“Las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán no permitirán (a los enemigos) acercarse al umbral del poder defensivo y misilístico del país”, ha advertido el general de división iraní en declaraciones ofrecidas este jueves en ocasión del 39º aniversario de la victoria de la Revolución Islámica de Irán.
El general Baqeri ha alertado sobre la intención hostil que busca EE.UU., país al que califica como “el faraón”, y el régimen sionista (Israel) y sus seguidores regionales y extraregionales contra las áreas estratégicas del poderío del sistema.
Ante este panorama, ha subrayado la plena preparación de las Fuerzas Armadas de Irán para hacer frente firmemente a los complots de los enemigos y la continuación de su movimiento para desarrollar su poder defensivo y disuasivo.
Las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán no permitirán (a los enemigos) acercarse al umbral del poder defensivo y misilístico del país”, ha advertido el jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas de Irán, Mohamad Husein Baqeri.
En otra parte de sus declaraciones, se ha referido a las consecuencias que dejó la victoria de la Revolución Islámica en la historia del mundo recalcando que el establecimiento de la República Islámica de Irán provocó un “choque geopolítico” y una “grieta estratégica” en el “bloque del poder” mundial.
“La victoria de la Revolución Islámica hizo colapsar el equilibrio de dos bloques Estados Unidos-la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) mientras apareció en esfera internacional una nueva lógica que contaba con las capacidades civilizadoras”, ha indicado.
En alusión a los logros del país tras el triunfo de la Revolución Islámica, el comandante iraní ha explicado que en la actualidad Irán es reconocido como un actor influyente en la esfera internacional, un poder que ha logrado recurriendo a sus capacidades internas en medio de las condiciones duras que vivía por las sanciones, amenazas y presiones impulsadas por los poderes hegemónicos, encabezado por EE.UU.
De acuerdo con Irán, EE.UU. ha lanzado una guerra psicológica e iranófoba por el programa misilístico iraní tras acusar a Teherán de suministrar misiles balísticos a Yemen. En este contexto, el presidente estadounidense, Donald Trump, organizó el lunes un almuerzo de trabajo en la Casa Blanca con representantes de países miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), donde acusó a Irán de “desestabilizar” el Oriente Medio.
tmv/ktg/msm/hnb
