• El presidente de Irán, Hasan Rohani, da un discurso en la ciudad de Kerman (sureste), 1 de febrero de 2018.
Publicada: jueves, 1 de febrero de 2018 9:49

El presidente de Irán, Hasan Rohani, resalta la seguridad que goza el país persa, en una región devastada en gran parte por la guerra, y asegura que esta estabilidad es resultado de los sacrificios del pueblo iraní que obtuvo su primer fruto con la victoria de la Revolución Islámica.

El mandatario iraní, en un discurso pronunciado este jueves desde la ciudad de Kerman (sureste de Irán), ha destacado la disponibilidad de la nación persa, hoy más que nunca, para defender la independencia, la seguridad y el sistema islámico del país.

“¿¡Qué parte de Oriente Medio es más seguro que nuestro país!?”, ha preguntado Rohani, además de afirmar que el país persa debe esta seguridad a la “unidad y estabilidad” de su pueblo que siempre ha estado luchando junto a las fuerzas de seguridad frente a los enemigos.

En una advertencia dirigida al Gobierno estadounidense, Rohani ha enfatizado que no crea que puede decidir por los iraníes, ya que estos lo conocen bien y aun no han olvidado los crímenes y torturas cometidos por los agentes de SAVAK (la Organización de Inteligencia y Seguridad Nacional de Irán entre los años 1957 y 1979) durante la dictadura de Pahlavi, que fueron entrenados y capacitados por la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés).

¿¡Qué parte de Oriente Medio es más seguro que nuestro país!?”, dice el presidente de Irán, Hasan Rohani.

 

En otro momento de sus declaraciones, con motivo del primer día de la celebración del 39º aniversario de la “Década del Alba”, un periodo de diez días que empieza desde el regreso del exilio del Imam Jomeini (P) hasta la victoria definitiva de la Revolución Islámica, Rohani ha remarcado el carácter democrático de esa victoria popular.

“Nosotros fuimos la única revolución que apenas dos meses después de lograr la victoria convocó elecciones para que la gente decida el sistema del país”, ha subrayado.

Durante la monarquía absoluta de la dinastía Pahlavi, la gente no tenía voz ni voto en la elección de sus autoridades, pero ahora el pueblo puede elegir de manera directa o indirecta a sus representantes.

La participación del pueblo iraní en los comicios ha alcanzado niveles récords. En las últimas elecciones celebradas en mayo de 2017, el 73 % de los ciudadanos ejerció su derecho a voto.

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