Pasar por estas localidades era imposible durante los últimos años, ya que los terroristas estaban posicionados en los campos de Daraa, en el suroeste del país árabe, y la vecina Al-Quneitra.
El Ejército sirio aseguró recientemente más de 25 poblados y localidades en la zona, además de apoderarse de varias colinas estratégicas, lo que provocó un cambio de las reglas de compromiso entre el Ejército y los grupos armados en todo el sur, y facilitó los avances.
Los terroristas del Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham) ya se han rendido y están saliendo hacia la provincia noroccidental de Idlib.
Los combates ahora se centran, en su mayor parte, contra los terroristas de grupo EIIL (Daesh, en árabe) que ocupan casi el 6 % de la superficie total de Daraa. Desde la colina de Al-Yabiyeh, se pueden observar los duros combates contra los elementos de Daesh que se despliegan hacia la cuenca de Al-Yarmuk, en el sur de Damasco (capital de Siria).
Las fuerzas aéreas están intensificando sus bombardeos, mientras los oficiales observan los resultados de cerca desde las colinas.
El 19 de junio, el Ejército sirio libró una gran batalla para recuperar toda la región del sur de manos del terrorismo. Hoy, alrededor del 95 % de Daraa y más del 65 % de la provincia de Al-Quneitra están bajo el control del Gobierno, tanto a través de la acción militar como de la exitosa reconciliación. Dentro de poco, el Ejército sirio se desplegará en todos los puntos en los que se encontraba antes de 2011.
Tras la recuperación de la gran mayoría de las provincias de Daraa y Al-Quneitra, la declaración de la liberación total del sur ya es cuestión de tiempo. Con estas victorias, todos los indicadores señalan que la provincia noroccidental de Idlib será el próximo destino del Ejército sirio.
Bashar Barazi, Damasco.
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