Según ha informado este lunes la agencia de noticias Al-Alam, al menos tres personas han muerto y otras 28 han resultado heridas, después de que militantes de la oposición siria atacaran con proyectiles contra zonas residenciales del este de Alepo, controladas por el Gobierno de Siria.
De acuerdo a las declaraciones de los residentes, uno de los proyectiles destruyó un mercado de verduras y frutas.
Estaba en mi puesto hablando con un cliente y sentí que algo me golpeaba en el hombro y el cuello. Vi que todo el mundo se caía. Había gritos, no sé de dónde venían. En el momento siguiente yo estaba en el hospital", ha dicho uno de los testigos heridos tras los ataques.
"Estaba en mi puesto hablando con un cliente y sentí que algo me golpeaba en el hombro y el cuello. Vi que todo el mundo se caía. Había gritos, no sé de dónde venían. En el momento siguiente yo estaba en el hospital", ha dicho uno de los testigos heridos tras los ataques al corresponsal de RT.
El ataque de hoy comenzó temprano esta mañana y duró hasta el mediodía, el peor momento, ya que en este horario cientos de miles de niños y adultos se dirigen a la escuela y al trabajo.
Hasta ahora, ningún grupo ha asumido la autoría del ataque.
Desde septiembre, Alepo, la ciudad más importante de Siria y sus zonas adyacentes han sido escenario de intensas batallas entre las fuerzas sirias y las bandas terroristas y grupos armados que tratan de romper el cerco impuesto por el Ejército sirio y sus aliados a sus posiciones en el sur y este de la urbe.
Desde hace más de un lustro, Siria vive sumida en un conflicto desencadenado por grupos armados y terroristas que intentan derrocar al Gobierno de Bashar al-Asad. Según una estimación de abril del enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Siria, Staffan de Mistura, el conflicto ha dejado ya unos 400.000 muertos.
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