• Prisioneros palestinos en la cárcel israelí de Al-Naqab, 15 de enero de 2020. (Foto: Alquds)
Publicada: martes, 9 de noviembre de 2021 2:21

HAMAS alerta que no se quedará de brazos cruzados ante el maltrato contra los presos palestinos en las cárceles israelíes y promete luchar hasta liberarlos.

En una entrevista exclusiva concedida el lunes a la agencia palestina de noticias Sama News, el jefe de la Oficina de Prisioneros de Guerra, Heridos y Mártires del Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Zahar Jabarin, informó que, a pesar de deseo de Israel, la Resistencia promete liberar a los presos palestinos en las cárceles de Israel. 

El funcionario palestino aseguró que la Resistencia palestina nunca rendirá ante el régimen sionista.

“Nuestro pueblo palestino es libre y su resistencia es victoriosa”, confirmó Jabarin añadiendo que los detenidos palestinos que huyeron de las cárceles, volvieron a abofetear a regimen de ocupación gritando por la libertad durante su proceso de juicio.

Por su parte, el portavoz de HAMAS, Abdullatif el-Kanu, además de advertir al regimen de Tel Aviv de que cualquier daño que cause a los prisioneros palestinos será considerado una declaración de guerra contra los palestinos, indicó que “nos monitoreamos cuidadosamente la situación de los detenidos”.

Asimismo, subrayó que la Resistencia no quedará con brazos cruzados ante la tiranía de Israel y saldrá en defensa de los presos.

 

Unos 4 mil 500 palestinos están en las cárceles israelíes. Al menos 41 de ellos son mujeres y hay 140 menores de edad. Muchos de estos presos han sido víctimas de la detención administrativa. Es decir, están en la cárcel sin cargo ni juicio.

A pesar de que varias organizaciones pro derechos humanos han denunciado los abusos en las prisiones israelíes, no se ha producido ningún cambio en la política del régimen sionista y los encarcelados siguen siendo víctimas de torturas.

Expertos opinan que, tras la escapada de los seis presos palestinos de la presión de Gilboa, Israel ha quedado humillado y se ha puesto en entredicho su capacidad militar y la potencia represiva de sus cárceles.

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