Asimismo, se produjo ya un grave deterioro en las condiciones de los presos palestinos en huelga de hambre debido a su detención administrativa, en un momento en que el régimen israelí insiste en negarse a liberarlos o fijar una fecha para poner fin a su detención.
La huelga de hambre de los presos palestinos se inició para reclamar el fin de las medidas abusivas impuestas por las autoridades israelíes. Forma parte de una lucha y rebelión contra las regulaciones penitenciarias del régimen de Tel Aviv, agravadas en los últimos meses.
Los presos palestinos viven una situación caótica en las cárceles israelíes, algunos de ellos, incluidos mujeres y menores de edad, permanecen en centros de detención durante largos periodos de tiempo a la espera de ser juzgados. A pesar de que varias organizaciones pro derechos humanos han denunciado los abusos en las prisiones israelíes, no se ha producido ningún cambio en la política del régimen sionista y los encarcelados siguen siendo víctimas de torturas.
jpb/hnb