• Buques de guerra rusos durante una maniobra militar.
Publicada: viernes, 2 de diciembre de 2016 8:46
Actualizada: viernes, 2 de diciembre de 2016 10:51

El envío de una escuadra de buques de guerra rusos a las costas de Crimea ha inquietado a Francia, que pide una desescalada de tensiones entre Rusia y Ucrania.

“Francia se ha preocupado por el despliegue de buques de guerra rusos frente a la cosa de Crimea”, anunció el jueves el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia, Romain Nadal, en un encuentro habitual con la prensa.

De este modo, el funcionario galo reaccionó al anuncio hecho por la Armada rusa que aseguraba que naves de guerra de la Flota del mar Negro tomaron posición en las costas occidentales de Crimea con el fin de garantizar la defensa aérea durante los ejercicios militares del Ejército de Kiev en la zona.

Francia se ha preocupado por el despliegue de buques de guerra rusos frente a la cosa de Crimea”, anunció el portavoz del Ministerio de Exteriores francés, Romain Nadal.

“Hacemos un llamamiento a todas las partes para que se abstengan de (aumentar más) la escalada (de tensiones) e instamos al diálogo, al que Francia está dispuesta a contribuir de todas las maneras posibles”, agregó el funcionario galo.

Pese a las críticas y la ira expresada por Rusia, Ucrania emprendió el jueves maniobras militares que incluyen el lanzamiento de misiles en aguas próximas a Crimea, una península anexionada por Rusia en 2014. Rusia tachó estas actividades de una “amenaza” y puso en estado de alerta su defensa antiaérea en Crimea.

 

"No sólo se trata de las baterías antiaéreas terrestres, sino de las navales y de los buques de la Flota del mar Negro. Son unidades militares autosuficientes a la hora de repeler tales amenazas", explicó una fuente oficial rusa citada por la agencia TASS.

Asimismo, el Ministerio ruso de Defensa citó al agregado militar ucraniano en Moscú y le entregó una nota de protesta al advertir que los disparos de misiles en esa zona suponen “una violación de las aguas territoriales” de Rusia.

Las relaciones entre Rusia y el Occidente siguen siendo frías desde el comienzo de la crisis de Ucrania en 2014 y las posteriores sanciones antirrusas impuestas por la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, que acusan a Rusia de involucrarse en el conflicto, lo que Moscú rechaza tajantemente.

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