Tres periodistas fueron asesinados en la última semana en México, donde activistas, funcionarios y legisladores debatieron sobre garantías para la no criminalización de la profesión, y justicia para los casos abiertos hasta el momento, durante la presentación del informe sobre el flagelo que también afecta a defensores, titulado “Frente al Riesgo y el Caos”.
Durante los últimos 8 meses, 12 periodistas han sido asesinados en diferentes estados del país, muchos de los cuáles se encontraban amenazados. Incluso, algunos de ellos, según documentan organizaciones independientes, estaban bajo el amparo del Mecanismo Federal de Protección a Defensores y Periodistas, que funciona desde el 2012 y que hasta la fecha mantiene 948 beneficiarios.
Cifras de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contras la libertad de expresión, documentan que de las 1140 investigaciones relacionadas con la libertad de prensa que se han emprendido en México entre el 2010 y el 2018, solo un 0,83 % han terminado en una sentencia condenatoria.
Según Reporteros Sin Fronteras (RSF), los nueve asesinatos de periodistas que se produjeron en el 2018 sitúan a México como el tercer país más violento del mundo para ejercer la profesión, y como el primero entre los países en los que no se vive una guerra.
Sara Morales Gallego, Ciudad de México.
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