En una entrevista concedida este lunes a HispanTV, Carlos Santa María, analista de temas internacionales, ha abordado la situación caótica que se vivió el sábado en Londres, cuando la Policía británica reprimió a los participantes que asistían a un homenaje a Sarah Everard, asesinada por un agente de Scotland Yard.
“En realidad, el Gobierno británico durante décadas o siglos siempre ha reprimido toda la libertad del pensamiento y expresión del sentimiento de los pueblos, siempre ha sido así, porque tienen mucho temor que la gente exprese o diga lo que siente, por eso una vigilia que es un acto de dolor público ha sido reprimido como si se tratara de una actividad que presentara un alto riesgo para la seguridad ciudadana”, ha opinado Santa María.
El entrevistado ha subrayado que la Policía Metropolitana de Londres (Scotland Yard), en aras de justificar la violencia ejercida contra los asistentes al acto multitudinario, se ha escudado detrás del mismo discurso repetitivo de proteger y garantizar la seguridad de la población alegando que estas personas alteraban el orden público por estar infringiendo las normas de la bioseguridad contra el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, decretada por las autoridades locales.
Poniendo la excusa de la COVID-19, ha proseguido, nadie se lo cree porque la realidad es otra distinta. “La radiografía es delicada. El año pasado, reportaron 118 feminicidios, la conclusión es muy clara: el Gobierno [británico] no quiere resolver el problema de la inseguridad y, obviamente, cree que la represión es la única alternativa o reprimir todo sentimiento colectivo”, ha detallado.
A juicio del experto, los gobiernos neoliberales en su intento de tener bajo control a la población han recurrido, o bien, a ejercer una represión al pensamiento libre, o bien, por medio del castigo a través de la presión o sanciones pecuniarias, además de usar “la inhabilitación laboral o social, poniéndolo entredicho públicamente, y finalmente que se pueda asesinar a una persona impunemente”.
Estos son algunos ejemplos claros de la incapacidad de un gobierno para entender que en la concordia y en el diálogo está la verdadera seguridad, ha resaltado, para luego concluir que “la represión de los sentimientos y el pensamiento humanos jamás será sinónimo del castigo, esa es la conclusión de lo que está ocurriendo en el Reino Unido hoy en día”.
Fuente: HispanTV Noticias
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