El senador demócrata por Connecticut, Chris Murphy, cuestionó en una entrevista con la cadena CNN, de la que hoy se han publicado fragmentos, la agresión militar de Estados Unidos contra Irán en colaboración con Israel. Subrayó que “el pueblo estadounidense no quiere más guerras” en Asia Occidental y aseguró que busca hacer rendir cuentas al presidente de EE.UU., Donald Trump, por sus ataques “ilegales” contra Irán.
En sus declaraciones, Murphy señaló que aún no se ha realizado una evaluación de los daños causados a las instalaciones nucleares iraníes tras los ataques estadounidenses, y adelantó que mañana por la tarde se presentará un informe al respecto en una sesión confidencial en el Senado, de la que espera obtener respuestas a algunas incógnitas.
No obstante, afirmó que la información disponible hasta ahora indica que “no hemos logrado asestar un golpe decisivo al programa nuclear iraní, y es posible que aún dispongan de hasta media tonelada de uranio enriquecido al 60 %, un nivel cercano al necesario para fabricar un arma nuclear”.
Asimismo, destacó que aún no tienen datos suficientes sobre la efectividad real de este ataque, pero sin duda alterará los cálculos de Irán.
Estados Unidos llevó a cabo el pasado 22 de junio de 2025 una operación militar, dirigida contra tres instalaciones nucleares clave de Irán: Fordo, Natanz e Isfahán. Según el presidente Donald Trump, los ataques, ejecutados con bombarderos furtivos B-2 Spirit y bombas antibúnkeres GBU-57 de alta penetración, habrían causado "daños monumentales" y destruido completamente las capacidades de enriquecimiento de uranio de Irán, con el objetivo de frenar su supuesto programa nuclear armamentístico.
Sin embargo, las declaraciones oficiales contrastan con evaluaciones más cautelosas y con la respuesta iraní, que minimiza el impacto y promete represalias.
Irán ha calificado los ataques como una “violación flagrante” de la Carta de la ONU, el derecho internacional y el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), describiéndolos como “salvajes” y “criminales”.
En respuesta, Irán lanzó misiles balísticos contra la base estadounidense de Al Udeid en Catar el 23 de junio. Teherán también disparó misiles contra los territorios ocupados por Israel, que causaron heridas en Tel Aviv.
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