“Ahora poseemos misiles de alta precisión que pueden recorrer distancias muy largas, y las nuevas tecnologías estadounidenses no han podido contrarrestarlos”, ha alabado el líder del movimiento popular yemení Ansarolá, Abdulmalik al-Houthi.
En un acto realizado este miércoles en la provincia de Taiz, el líder yemení ha puesto de relieve que Arabia Saudí ha recibido ayuda de todo el mundo e incluso ha pedido apoyo al régimen de Israel, a fin de tener unos sistemas, capaces de derribar los misiles de Yemen.
“El hecho de que nuestro país haya utilizado profusamente misiles balísticos supone un insulto y la humillación de Estados Unidos y Arabia Saudí”, ha destacado.
Al enfatizar que la principal prioridad de Yemen es hacer frente a la agresión de la llamada coalición, liderada por Riad, Al-Houthi ha asegurado que el país continúa esforzándose por tener los aviones no tripulados (drones) con mayor efectividad y tecnología más avanzada.
“Continúan las medidas para desarrollar nuestras capacidades de defensa aérea, y en los últimos años hemos derribado todo tipo de drones enemigos”, ha recalcado.
Esto se debe a que aún continúa la amenaza militar de los agresores, quienes están preparando municiones para la siguiente fase de tensiones, tal y como ha indicado el líder de Ansarolá.
Ha puntualizado que nadie puede incautar la libertad, la independencia y la dignidad de la nación yemení, para luego prometer la expulsión de los enemigos y recuperar todo el territorio yemení. “No permitiremos que continúen la agresión y el asedio [de Yemen]”, ha dejado claro.
La agresión contra el país más pobre del mundo árabe comenzó en marzo de 2015, con el inicio de una campaña de bombardeos y bloqueo del reino árabe y sus aliados, bajo el pretexto de restaurar en el poder al fugitivo expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi y aplastar Ansarolá.
No obstante, las Fuerzas Armadas yemeníes y los comités populares aliados se hacen cada vez más fuertes, de modo que Riad y sus socios no han alcanzado ninguno de sus objetivos.
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