Fuentes locales, bajo condición de anonimato, han reportado este martes a la cadena de televisión yemení Al Masirah que aviones de combate saudíes atacaron varios vehículos que transitaban por una carretera en el área de Ghaferah, en el distrito de Dhaher, y que en los automóviles viajaban los invitados a una boda.
Arabia Saudí y sus aliados, que ya han atacado bodas en otras ocasiones, en este ataque han acabado con la vida de 11 personas y dejado heridas a otras tantas, en su mayoría mujeres y niños. Algunas de ellas se encuentran en estado crítico, por lo que se espera que el número de muertos aumente.
Paralelamente, una mujer ha muerto cuando un avión militar saudí ha atacado un edificio residencial en el distrito de Haydan, de la misma provincia yemení, un incidente que ha provocado grandes daños en la zona.
Estos no han sido los únicos ataques de la jornada. Tres campesinos han perdido la vida y dos han resultado heridos tras impactar un vehículo aéreo no tripulado (dron) saudí contra una granja del distrito de Hayran, en la provincia de Hajjah, en el noroeste de Yemen.
Además, otras tres personas también han muerto en un ataque aéreo saudí contra la ciudad portuaria occidental de Al-Hudayda, ubicada a 150 kilómetros al suroeste de la capital, Saná, que es objeto de una nueva ofensiva apoyada por Riad.
En respuesta a estos ataques contra la población indefensa yemení, las fuerzas yemeníes han disparado un misil balístico de corto alcance en la provincia costera occidental de Yemen de Al-Hudayda contra las posiciones de los milicianos leales al expresidente yemení, Abdu Rabu Mansur Hadi, y mercenarios saudíes, por lo que varios de ellos han muerto o resultado heridos.
Por otra parte, las fuerzas yemeníes han disparado un misil balístico Badr-1 de corto alcance contra la base militar de King Faisal, en la ciudad de Jamis Mushait, en la región suroccidental de Jizan, en Arabia Saudí, aunque aun no hay reportes sobre posibles víctimas o la magnitud del daño causado.
El Ministerio de Derechos Humanos de Yemen reportó a finales de marzo que la agresión liderada por Arabia Saudí y sus aliados ha dejado 600 000 civiles muertos y heridos desde el inicio de la sangrienta ofensiva en marzo de 2015.
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