La Resistencia Islámica de Irak declaró en un comunicado que atacó con drones la base estadounidense situada en Al-Rukban en el sur de Siria.
Asimismo, informó que utilizó un aparato aéreo teledirigido para golpear otra base ilegal que ocupa Estados Unidos en el campo petrolífero de Al-Omar, en el este del país levantino.
Estos ataques ocurrieron la misma jornada en que Estados Unidos se atribuyera la responsabilidad de una ofensiva a una sede de las Unidades de Movilización Popular (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) de Irak en Bagdad, capital iraquí.
El movimiento iraquí Hezbolá Al-Nuyaba, una de las facciones de Al-Hashad Al-Shabi, informó que en el ataque estadounidense con drones murieron cuatro personas y otras seis resultaron heridas. Entre las víctimas mortales se encuentra el subcomandante de operaciones de Bagdad, Mushtaq Talib al-Saidi (Abu Taqwa).
Según ha detallado la Resistencia Islámica de Irak, sus ataques a objetivos estadounidenses se enmarcan en sus esfuerzos para echar a las fuerzas ocupantes estadounidenses de Irak y de la región y, en respuesta a los ataques de Israel contra la Franja de Gaza que en los últimos 90 días han dejado 22 438 muertos, la mayoría mujeres y niños.
Funcionarios militares estadounidenses afirman que, desde el 17 de octubre, sus tropas han sido blanco de 103 ataques en Irak y Siria, la mayoría de estos reivindicados por la Resistencia Islámica en Irak.
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