Los profesores de la enseñanza secundaria han vuelto a pisar las calles de las principales ciudades francesas. Con esta nueva manifestación reafirman su rechazo a la reforma de la educación secundaria que el Gobierno quiere hacer entrar en vigor en 2016.
Se suprimen clases bilingües, se modifican asignaturas, desaparecen otras y todo ello, según los sindicatos, con el mayor desprecio hacia los profesores y los alumnos. La reforma acarreará despidos de profesores y no se dota a los colegios con medios suficientes para mejorar las condiciones de trabajo.
También ha causado un gran malestar entre los sindicatos que el Gobierno aprobara por decreto la reforma la misma noche en la que decenas de miles de profesores se habían manifestado en las calles, el pasado día 19 de mayo, para pedir una negociación. Esta provocación gubernamental ha soliviantado aún más los ánimos, y los profesores están dispuestos al enfrentamiento.
Los sondeos muestran que la mayoría de los franceses no entienden ni aprueban esta reforma y apoyan a los sindicatos de profesores en contra de la ministra de Educación, Najat Vallaud-Belkacem, y del Gobierno de François Hollande.
Juan José Dorado, París.
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