Suecia ha pedido cadena perpetua para Hamid Nouri, exfuncionario iraní, acusando de abuso y tortura de prisioneros en 1988, alegatos formulados por el grupúsculo terrorista Muyahidín Jalq (MKO, por sus siglas en inglés).
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha convocado este domingo a Mattias Lentz, el nuevo embajador sueco en Teherán (la capital iraní), en señal de protesta por las acusaciones “infundidas” contra Nouri, de 61 años, quien fue arrestado tras su arribo al aeropuerto de Estocolmo (la capital de Suecia) en 2019 y desde entonces no ha podido ver a su familia.
La Cartera iraní ha condenado enérgicamente la detención del aludido exfuncionario, calificándola de “totalmente ilegal” e impulsada, bajo acusaciones falsas y una campaña de difamación hostil contra la República Islámica.
Durante la sesión 89 de su juicio el viernes, los fiscales suecos leyeron un resumen de la acusación contra Nouri en el tribunal, un día después de solicitar la pena máxima para él.
Esto, mientras que el grupúsculo terrorista antiraní MKO es responsable de la mayoría de los asesinatos contra el pueblo y los funcionarios iraníes desde la Revolución Islámica de 1979.
glm/ctl/hnb