En una nota publicada el domingo en las redes sociales, la relatora especial de Naciones Unidas para los Territorios Palestinos Ocupados, Francesca Albanese, criticó duramente a las instituciones mundiales por no exigir cuentas a Israel y consideró la creciente reacción europea contra la participación de Israel en Eurovisión como una señal de un cambio de conciencia pública.
Al respecto, denunció que la ausencia de sanciones o suspensiones ha permitido que el genocidio de Gaza se “normalice”.
“Israel no ha sido suspendido de la ONU, los foros internacionales, la UEFA, la FIFA, la FIBA ni de eventos culturales. El genocidio continúa porque está normalizado”, agregó, aludiendo las siglas de organizaciones deportivas.
Albanese remarcó que la retirada de varias naciones europeas del concurso es el comienzo de una rendición de cuentas significativa. “Y entonces, sin más, comienza la rendición de cuentas en forma de boicot europeo. ¡Se acabó la euroviciosa!”, elogió.
El movimiento para boicotear la edición de 2026 del Festival de la Canción de Eurovisión por su negativa a realizar una votación interna para suspender la participación de Israel ha ganado fuerza a medida que los gobiernos enfrentan presión interna por su participación en el concurso.
Eslovenia, España, los Países Bajos e Irlanda ya han confirmado que no participarán, citando los crímenes de guerra de Israel en Gaza como motivo de su retirada.
Islandia también ha indicado que mantendrá más conversaciones sobre su estatus de participación.
Los comentarios de Albanese ponen de relieve un patrón sostenido en las esferas políticas, deportivas y culturales en el que Israel conserva su plena membresía y participación, una postura que, según los críticos, constituye una aprobación tácita de sus acciones militares.
Desde octubre de 2023, Israel ha asesinado a aproximadamente 70 354 palestinos en Gaza, en su mayoría mujeres y niños, y dejando heridos a otros 171 030, según los últimos datos del Ministerio palestino de Salud.
msm/ncl
