En un comunicado publicado el domingo, la organización ha declarado que aproximadamente un millón de personas desplazadas, incluidos cientos de pacientes gravemente enfermos y recién nacidos, ocupan ahora sólo el 15 % del territorio palestino bloqueado, donde la grave escasez de agua ha alcanzado ya niveles críticos.
“MSF continúa distribuyendo agua en la ciudad, pero como no quedan reservas de agua, si las fuerzas israelíes hacen imposible la producción y distribución de agua potable, la gente morirá en cuestión de días”, ha advertido Jacob Granger, coordinador de emergencias de MSF en Gaza.
MSF ha afirmado además que los incesantes bombardeos y la ofensiva terrestre de Israel en el norte mataron a menudo varias veces a cientos de palestinos y desplazando a innumerables personas. “Algunos de nuestros colegas han sido desplazados más de 11 veces desde 2023”, ha añadido.
El ejército israelí ha emitido múltiples advertencias de evacuación para la ciudad de Gaza, pero muchos residentes dicen que no tienen otro lugar adónde ir.
Un portavoz militar israelí emitió el domingo una advertencia a los habitantes de la zona portuaria de Gaza y del barrio de Al-Rimal para que evacuen inmediatamente a una llamada “zona humanitaria” en el sur, donde los habitantes de Gaza dicen que ya no hay espacio para montar tiendas de campaña.
Esto mientras Israel ha atacado repetidamente la zona en el sur de la franja sitiada, adonde ha instado a la gente a desplazarse.
El genocidio del régimen israelí en Gaza continúa, y está destruyendo más edificios residenciales e infraestructura en la ciudad de Gaza. Al menos 65 personas han muerto desde el amanecer de este domingo en Gaza.
El número total de muertos ha superado los 64 800 desde el comienzo de la guerra genocida de Israel en octubre de 2023.
Antes del último ataque, las Naciones Unidas habían estimado que alrededor de un millón de personas vivían en la ciudad de Gaza y sus alrededores, donde se declaró oficialmente la hambruna el mes pasado.
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