Un informe publicado el martes por el Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono) muestra que Washington ha decidido hacer un gasto multimillonario en Siria, sufragado por su presupuesto militar del año 2020.
Conforme al dosier, el Pentágono tiene planeado dedicar unos 300 millones de dólares a entrenar a fuerzas aliadas suyas como las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), supuestamente para acabar con el grupo terrorista takfirí EIIL (Daesh, en árabe).
En el documento se lee además que el Gobierno norteamericano gastará unos 250 millones de dólares para “construir una fuerza de seguridad fronteriza en Siria”.
Las nuevas informaciones sobre el gasto militar norteamericano en Siria se han publicado cuando todos esperan la retirada militar de Washington de Siria, anunciada por el presidente de EE.UU., Donald Trump, en diciembre de 2018.
Estados Unidos tiene desplegados más de 2000 soldados en Siria, en su mayoría en el norte del país, donde ha establecido unos 20 centros militares, entre bases e instalaciones, sin la autorización del Gobierno sirio. Otra parte de sus efectivos se encuentra en la base de Al-Tanf, una región situada en el extremo suroriental de la provincia siria de Homs, a lo largo de las fronteras de Siria con Jordania e Irak.
El Gobierno de Damasco siempre ha denunciado como ilegal la presencia de esas fuerzas extranjeras, reiterando que los estadounidenses y los milicianos respaldados por Washington no solo han complicado la crisis en que sigue el país, sino que de hecho han obstaculizado toda solución a la misma al reforzar la dinámica de guerra mediante terceros.
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