Li Song, representante permanente de China ante la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), afirmó el miércoles en la reunión del Consejo de Gobernadores que Pekín se opone al uso del “mecanismo de snapback” por parte de Francia, Reino Unido y Alemania (E3) para reinstaurar sanciones contra Irán.
Asimismo, al destacar la necesidad de intensificar los esfuerzos diplomáticos respecto al programa nuclear iraní, puso de manifiesto que la activación del llamado “snapback” no solo no ayuda a reconstruir la confianza ni a reanudar las negociaciones, sino que también puede tener consecuencias desastrosas y destruir los esfuerzos diplomáticos.
En tal sentido, agregó que “el tema nuclear de Irán solo podrá resolverse adecuadamente si se respeta plenamente el derecho de Irán al uso pacífico de la energía nuclear y se garantiza la naturaleza pacífica de su programa nuclear.
Además, el enviado chino apuntó que “este proceso debe desarrollarse bajo el marco de la estricta supervisión internacional de la AIEA”.
Durante la reunión, el representante de China también recordó que en junio de este año, Estados Unidos e Israel llevaron a cabo ataques militares contra instalaciones nucleares iraníes bajo las salvaguardias de la AIEA, lo que debilitó gravemente el proceso diplomático sobre el programa nuclear de Irán y obstaculizó la cooperación de Teherán con el organismo.
“China se opone firmemente a este tipo de intimidación hegemónica y exige a Estados Unidos e Israel que cesen el uso indebido de la fuerza militar”, subrayó.
Li agregó que “China continuará colaborando con todas las partes de manera responsable, constructiva y basada en principios, para que el proceso político y diplomático relacionado con el programa nuclear iraní retome su curso y se preserve de manera sería el régimen internacional de no proliferación de armas nucleares”.
¿Qué es el ‘snapback’ y cómo puede ser activado?
El mecanismo de reversión rápida fue incorporado en la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad, que respaldó el JCPOA (nombre oficial del acuerdo nuclear alcanzado entre Irán y el Grupo 5+1). Permite que cualquier parte del acuerdo active un proceso que restaura todas las sanciones previas de la ONU contra Irán —que fueron levantadas bajo el acuerdo— si se considera que Irán ha incumplido “significativamente” sus obligaciones.
Las sanciones son amplias, y van desde prohibiciones internacionales sobre transferencias de armas, equipos nucleares y enriquecimiento de uranio hasta servicios bancarios, congelación de activos y restricciones de viaje.
La República Islámica de Irán, por su parte, ha subrayado que el trío europeo no tiene motivos legales para invocar el mecanismo snapback, ya que no han cumplido sus propios compromisos bajo el acuerdo tras la salida unilateral de EE.UU. del JCPOA en mayo de 2018.
ayk/hnb