• Mercenarios de la coalición saudí vigilan desde su puesto los movimientos de los combatientes yemeníes en la frontera sureña. (Foto: Al-Muheet)
Publicada: sábado, 5 de junio de 2021 9:30

EE.UU. y Arabia Saudí están en el agujero que ellos mismos han cavado en Yemen, pero deberían dejar de hacerlo más profundo, dice un exdiplomático estadounidense.

En declaraciones ofrecidas el viernes en una entrevista con la cadena Press TV, el exdiplomático estadounidense J. Michael Springmann censuró las conversaciones del secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, con el príncipe heredero saudí, Muhamad bin Salman, sostenidas el miércoles en Riad “para mejorar las defensas de Arabia Saudí” en la prolongada guerra que han impuesto al pueblo de Yemen.

Criticó que dicho encuentro tuvo lugar mientras que el presidente estadounidense, Joe Biden, se había comprometido a detener esta guerra, iniciada en marzo de 2015 por Arabia Saudí, con el respaldo de Estados Unidos, el Reino Unido y otros Estados europeos, como Francia y Alemania. Los bombardeos saudíes han causado la muerte de cientos de miles de civiles, entre ellos mujeres y niños, en Yemen y la destrucción de su infraestructura.

 

No obstante, Springmann destacó los avances del Ejército de Yemen, el país más pobre del mundo árabe, en el campo de batalla y las incursiones de represalia que realiza en el suelo del reino árabe. Al respecto, trajo a colación las declaraciones del jefe del Comando Central de Estados Unidos (Centcom), el general Kenneth F. McKenzie, en las que la semana pasada subrayó que Arabia Saudí está bajo un constante bombardeo de Yemen, con una variedad de misiles balísticos, misiles de crucero y pequeños UAS (sistemas aéreos no tripulados) que les preocupan mucho.

Estados Unidos, al igual que Arabia Saudí, parece estar fuera de la realidad.  Están en un agujero que ellos mismos hicieron, y realmente deberían dejar de hacerlo más profundo”, advirtió Springmann.

La llamada coalición liderada por Arabia Saudí lanzó hace más de seis años una campaña de bombardeos contra Yemen, con el visto bueno de Estados Unidos y prescindiendo del permiso de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con el objetivo de restaurar en el poder a Abdo Rabu Mansur Hadi, aliado de Riad.

Pese a las advertencias sobre la crítica situación humanitaria en el país más pobre del mundo árabe, el régimen de los Al Saud, lejos de poner fin a su brutal agresión militar, sigue intensificado sus atrocidades contra Yemen con el apoyo del Occidente.

Ante tal situación, Yemen advierte que no detendrá sus ataques contra los objetivos de los agresores, mientras la llamada coalición liderada por Riad no termine su ofensiva contra los yemeníes.

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