De acuerdo con fuentes castrenses citadas por la cadena de televisión yemení Al-Masirah, las fuerzas del movimiento popular Ansarolá han vuelto a atacar un campamento militar en la provincia suroccidental saudí de Jizán, abatiendo a dos guardias fronterizos.
Al menos 16 soldados saudíes han sido alcanzados por los francotiradores yemeníes en las zonas fronterizas en lo que va de año, según ha calculado Ansarolá.
El Ejército y las fuerzas de comités populares yemeníes afirman actuar en represalia por los bombardeos perpetrados por el régimen de Al Saud contra las infraestructuras y civiles en Yemen.
Desde marzo de 2015, cuando Riad lanzó una ilegal campaña de ataques aéreos contra el país más pobre del mundo árabe, en un intento por restaurar en el poder al expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, su estrecho aliado, las localidades fronterizas del sur de Arabia Saudí suelen ser blanco de los ataques de las fuerzas yemeníes.
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