Las unidades del Ejército Árabe Sirio entraron el jueves en la ciudad de Tafas, sita en la provincia suroccidental de Daraa, para establecer la seguridad y la estabilidad en dicha zona, según informó la agencia estatal siria de noticias, SANA.
En un artículo publicado este viernes, el portal web de la cadena iraní Al-Alam ha indicado que, ante tal coyuntura, mientras que Tafas depende administrativamente de la ciudad de Muzayrib (suroeste de Daraa) se habla de la reactivación de todas las instituciones gubernamentales después de ocho años.
De hecho, agrega, el Ejército sirio ha recuperado Tafas después de su ocupación por los terroristas del Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath al-Sham) en 2013 y ahora va a ser controlada por el Gobierno de Damasco, presidido por Bashar al-Asad.
Tal y como indica la fuente, las fuerzas sirias entraron en Tafas en respuesta a una solicitud de los lugareños al Gobierno sirio debido a los problemas de seguridad creados recientemente por los terroristas.
Además, sostiene que la operación de liberación se realizó a base de un acuerdo alcanzado entre el comité central de la ciudad y el Ejército luego de los enfrentamientos registrados en la zona debido a la solicitud del Ejército para la extradición de las personas buscadas.
En este mismo contexto, citando un funcionario sirio, el diario local Al Watan afirma que el acuerdo se basa en la retirada de seis comandantes armados y la entrega de armas, así como las bases ocupadas, ya que los hombres armados acordaron abandonar Tafas y entregar sus armamentos.
Sin lugar a dudas, la entrada de las fuerzas sirias a esta ciudad significa el dominio completo del Ejército sobre las regiones sureñas del país y la expulsión de extremistas de la misma con el objetivo de combatir el terrorismo y zanjar la crisis siria mediante el uso del poder militar como la política de paz, puntualiza Al-Alam.
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