• Humo y llamas se alzan tras un ataque aéreo de la coalición liderada por EE.UU. en la ciudad de Kobani, en el norte de Siria.
Publicada: jueves, 10 de noviembre de 2016 20:02
Actualizada: jueves, 10 de noviembre de 2016 22:12

Al menos 23 civiles, incluidos 7 menores, han muerto a raíz de un ataque aéreo de la coalición encabezada por EE.UU. en la ciudad siria de Al-Raqa (norte).

“Los bombardeos aéreos de la coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe) mataron a al menos 23 civiles, entre ellos 7 niños y 9 mujeres, en el pueblo de Heisha, en las proximidades de Al-Raqa”, reza un comunicado de la opositora Coalición Nacional Siria (CNS).

El documento difundido este jueves en el sitio Web del CNS condena este ataque “horrible” de los aviones de la coalición, que lidera EE.UU., así como cualquier otro ataque dirigido contra civiles y destaca la necesidad de tomar medidas para no repetir tales incidentes.

Los bombardeos aéreos de la coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe) mataron a al menos 23 civiles, entre ellos 7 niños y 9 mujeres, en el pueblo de Heisha, en las proximidades de Al-Raqa”, reza un comunicado de la opositora Coalición Nacional Siria (CNS).

Asimismo, hace un llamamiento a abrir una investigación exhaustiva sobre lo ocurrido y urge a la coalición a revisar el procedimiento y los reglamentos operacionales contra el grupo terrorista Daesh en el territorio sirio y castigar a los principales responsables.

Aviones de combate de la llamada coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe), liderada por EE.UU.

 

El miércoles, el Mando Central de Estados Unidos (CENTCOM) admitió que sus campañas aéreas llevadas a cabo en Irak y Siria dejaron 64 civiles muertos y ocho heridos en menos de 10 meses; cifras que contradicen con las anunciadas por organismos pro derechos humanos.

Según un informe de Amnistía Internacional (AI), en los últimos dos años, los bombardeos de la coalición en nombre de la lucha antiterrorista causaron la muerte de 300 civiles solo en Siria. “La coalición no tomó precauciones adecuadas para minimizar el daño a civiles”.

EE.UU. comenzó en agosto de 2014 a bombardear varias regiones de Irak, so pretexto de combatir al EIIL, y amplió el 23 de septiembre de ese mismo año su campaña a Siria en el marco de una coalición en la que participan varios de sus aliados regionales y occidentales.

Mientras tanto, las autoridades iraquíes y sirias cuestionan ampliamente la efectividad de dichos bombardeos, al mismo tiempo que critican a la coalición por los daños estructurales y las muchas víctimas civiles que han dejado tras de sí sus acciones.

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