Un dron ucraniano impactó el viernes un edificio en Gronzi, capital de la región de Chechenia, al sur de Rusia. El ataque no causó víctimas, según los medios locales.
En la misma jornada, el líder checheno, Ramzan Kadyrov, lanzó una dura advertencia al gobierno de Kiev que las fuerzas chechenas responderían a las fuerzas ucranianas durante la próxima semana.
“A partir de mañana y durante la semana, los fascistas ucranianos sentirán una dura respuesta… Excepto que, a diferencia de ellos, no lanzaremos un ataque cobarde contra objetivos pacíficos”, destacó Kadyrov mediante un mensaje en su cuenta en las redes sociales.
🇺🇦🇷🇺 Impacto de un dron lanzado por Ucrania contra un edificio de gran altura en Grozny, Chechenia, Rusia, en el día de hoy. pic.twitter.com/5eG8gWYmtE
— Global News ESP (@GlobalNewsESP) December 5, 2025
Al afirmar que el ataque de dron no causó víctimas, Kadyrov señaló que el ataque a un complejo civil en el interior de Rusia y lejos de cualquier posición militar “no tenía sentido táctico”.
No es la primera vez en las últimas semanas que fuerzas ucranianas atacan infraestructuras civiles en el interior del territorio ruso utilizando drones.
Anteriormente, los ataques ucranianos han afectado a varios lugares de Chechenia, incluido un cuartel de policía y una academia de entrenamiento militar. Según los funcionarios regionales, dichas agresiones no tienen ningún propósito militar y su objetivo principal es causar miedo.
El 26 de noviembre, el Ministerio de Defensa de Rusia, en un comunicado, declaró que mientras las fuerzas de Moscú continúan su avance en las líneas del frente, Kiev ha intentado generar pánico dentro de Rusia atacando posiciones no militares.
Según la nota, en la madrugada del 26 de noviembre, las defensas aéreas rusas repelieron más de 136 ataques con drones lanzados por las fuerzas armadas ucranianas.
El 25 de noviembre, el ministerio anunció que las defensas aéreas rusas interceptaron 249 drones ucranianos, pero varios drones impactaron áreas civiles dentro de las regiones de Rostov y Novorossiysk, hiriendo a 18 civiles.
El conflicto en Ucrania comenzó en 2022, después de años de interferencia política y militar occidental en Kiev que generó inestabilidad a lo largo de la frontera rusa y finalmente obligó a Moscú a intervenir para proteger sus intereses nacionales y su seguridad regional.
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