La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, ha cargado este martes contra la Administración estadounidense, presidida por Joe Biden, por intentar impedir que la Corte Penal Internacional (CPI) investigue a la cúpula política y militar israelí por los crímenes de guerra y otros actos de barbarie cometidos en la Franja de Gaza desde octubre pasado.
El lunes, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó que Estados Unidos “no apoya” la investigación de la CPI sobre la ofensiva israelí contra Gaza, bajo el argumento de que “no cree que tenga jurisdicción”.
“Honestamente, es una muestra de la estratificación de la conciencia entre los estrategas en la Casa Blanca”, ha dicho Zajárova, haciendo referencia a la postura hipócrita de Washington ante las investigaciones de la CPI sobre los crímenes de Israel y las órdenes de aprehensión emitidas por el tribunal contra las autoridades rusas, entre ellos el presidente, Vladímir Putin, por la operación militar en Ucrania, iniciada en febrero de 2022.
“Washington apoyó plenamente, si no incitó, la emisión de órdenes de arresto contra la cúpula rusa”, ha manifestado la diplomática rusa, además de denunciar que “el sistema político estadounidense no reconoce la legitimidad de esta estructura [CPI] en relación consigo misma o con sus satélites”, en alusión a Israel.
Asimismo, ha tachado de “absurda” esta postura de Estados Unidos, y censurado a Washington por imponer sanciones a los jueces de la corte cuando ve amenazados sus propios intereses.
A pesar de que el régimen de Israel no forma parte de los 124 países signatarios del Estatuto de Roma que han reconocido la jurisdicción de la CPI —tampoco forman parte EE.UU., China y Rusia—, el fiscal general de la corte, Karim Jan, anunció en octubre que el tribunal sí tiene jurisdicción para investigar crímenes de guerra cometidos por Israel en la Franja de Gaza, entre ellos la masacre de más de 34 500 civiles palestinos.
Los medios israelíes, entre ellos el rotativo Maariv, anunciaron que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, está “extremadamente alarmado y nervioso” por la posibilidad de que la CPI emita una orden de arresto en su contra. Detalló que el premier israelí ha estado presionando a Biden y otras partes relevantes sobre el asunto para que impidan esta eventual decisión de la corte.
Sin embargo, Maariv afirmó que la emisión de una orden de detención contra Netanyahu es “solo cuestión de tiempo”, y agregó que el ministro de asuntos militares israelí, Yoav Gallant, y posiblemente el jefe del estado mayor del ejército de este régimen, Herzi Halevi, también correrían la misma suerte.
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