“El informe no dice nada sobre los desplazamientos tectónicos en el ámbito de la seguridad europea, como resultado de la expansión de las infraestructuras militares estratégicas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), hacia las fronteras rusas y los propios planes de EE.UU. para el despliegue de nuevas armas nucleares”, destacó el miércoles la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajarova.
La vocera hizo estos señalamientos al comentar el informe 2021 sobre la Adhesión y el Cumplimiento de los Acuerdos y Compromisos en materia de Control de Armas, No Proliferación y Desarme, publicado por el Departamento de Estado de EE.UU.
Zajarova señaló que las acusaciones imputadas por Washington contra Moscú sobre el control de armas carecen de fundamento y simplemente sirven como una tapadera para las acciones destructivas del propio Estados Unidos. Rusia considera cínico el enfoque del Departamento de Estado de EE.UU. sobre el problema de las armas nucleares no estratégicas, agregó la diplomática.
Asimismo, la funcionaria rusa tachó de “estereotipadas” las acusaciones de que Rusia viola el Tratado de Cielos Abiertos y acusó que estas imputaciones están destinadas a “encubrir exclusivamente las propias acciones destructivas” con respecto a este acuerdo.
“Dimos respuestas exhaustivas a todos los alegatos y después de la retirada de Estados Unidos del Tratado de Cielos Abiertos, nos parece redundante hacer más comentarios”, zanjó.
Previamente, el vicecanciller ruso, Serguéi Riabkov, había instado a EE.UU. a no desplegar armas nucleares en territorios de sus aliados, que no se consideran potencian nucleares, ya que ello llevaría a la desestabilización de la región, además de generar nuevos riesgos, lo que es una violación de los párrafos 1 y 2 del Tratado de No Proliferación (TNP) nuclear.
De igual forma, el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigú, lamentó el martes que la Administración estadounidense, presidida por Joe Biden, junto con la OTAN, siga protagonizando “actividades provocativas” en el mar Negro.
La semana pasada Shoigú denunció que EE.UU. y la OTAN estaban movilizando fuerzas hacia las fronteras europeas de Rusia en el contexto del mayor ejercicio militar de la Alianza en 30 años, bautizado como Defender Europe 21, por el que desplegaron 40 000 efectivos y 15 000 unidades de material bélico, incluidas aeronaves estratégicas, cerca de las fronteras rusas.
Las tensiones entre Rusia y el Occidente se han incrementado en las últimas semanas, especialmente después de que Ucrania enviara varias tropas bajo el paraguas de la OTAN, cerca del flanco occidental de Rusia en medio de los enfrentamientos con los independentistas en el este de Ucrania.
Moscú advierte que cualquier despliegue de tropas de la Alianza Atlántica en la zona fronteriza provocaría una escalada de la situación y deja claro que dará una respuesta contundente a cualquier acción provocativa del Occidente.
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