• El vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Kazem Qaribabadi.
Publicada: viernes, 26 de septiembre de 2025 2:58

Un alto cargo de Irán adelanta que el primer paso de Teherán ante la activación del snapback sería poner fin al entendimiento de El Cairo entre Irán y la AIEA.

Ante la amenaza de Alemania, Francia y el Reino Unido (E3) de activar las sanciones de la ONU contra Irán a partir del 30 de septiembre, Kazem Qaribabadi, viceministro iraní de Asuntos Jurídicos e Internacionales, aseguró que “Irán responderá adecuadamente a cualquier acción hostil, como el retorno de resoluciones vencidas del Consejo de Seguridad, y que, como primer paso, se pondrá fin al entendimiento de El Cairo entre Irán y la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA)”.

El vicecanciller informó de este posible paso en una reunión sostenida el jueves con representantes de 10 miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), celebrada en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.

En el encuentro, agregó Qaribabadi, presenté un informe sobre los últimos acontecimientos relacionados con la Resolución 2231, así como los resultados de las intensas consultas diplomáticas entre la delegación de la República Islámica de Irán con los tres países europeos firmantes del pacto nuclear y la Unión Europea.

El vicecanciller continuó refiriéndose a los esfuerzos de Irán por reabrir la vía diplomática, especialmente durante las últimas semanas, y calificó de poco realistas y deshonestas las afirmaciones de los funcionarios estadounidenses y europeos sobre la adhesión a la diplomacia.

Según el titular diplomático, “recalqué el firme compromiso de la República Islámica de Irán con una solución diplomática y señalé que el proyecto de resolución presentado por Rusia y China para la prórroga técnica de la Resolución 2231 representa la última oportunidad para evitar la escalada de las tensiones euro-estadounidenses autogeneradas”.

 

Qaribabadi también dijo en la cita que todos y cada uno de los miembros del Consejo tienen una gran responsabilidad al respecto: o bien deben demostrar su renovado compromiso con la diplomacia y cumplir con su deber de mantener la paz y la seguridad internacionales, o asumirán la plena responsabilidad de perturbar el camino de la diplomacia y sus consecuencias.

A finales de agosto, el trío europeo invocó el mecanismo de snapback, previsto en la Resolución 2231, con el objetivo de restablecer todas las sanciones de la ONU contra Irán, otorgando al Consejo de Seguridad un plazo de 30 días para decidir si mantiene el levantamiento de las sanciones o las reimpone. El pasado viernes, dicho Consejo votó en contra de la continuidad del levantamiento de las sanciones, que podrían restablecerse a finales de septiembre si en los próximos días no se registran avances claros en el ámbito diplomático.

El Gobierno iraní ha calificado de “nula y sin valor” la reactivación del mecanismo snapback, argumentando que los tres países europeos no han cumplido sus compromisos en virtud del acuerdo nuclear firmado con Irán en 2015 tras la salida de EE.UU. del mismo pacto en 2018, por lo que carece de cualquier autoridad legal para hacerla.

En este contexto, el 9 de septiembre, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Seyed Abás Araqchi, se reunió el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Rafael Grossi, en El Cairo, capital egipcia, donde las partes lograron concretar un entendimiento sobre cómo Irán implementaría sus obligaciones de salvaguardias ante los acontecimientos derivados de los ataques ilegales de Israel y Estados Unidos contra las instalaciones nucleares iraníes en junio.

En este sentido, ha enfatizado que las medidas prácticas acordadas para implementar las salvaguardias se ajustan plenamente a la ley del Parlamento, abordan las preocupaciones de Irán y proporcionan un marco para la cooperación continua en el marco del acuerdo firmado con la AIEA.