• El portavoz de la Cancillería de Irán, Naser Kanani, durante una rueda de prensa en Teherán, la capital. (Foto: IRNA)
Publicada: martes, 4 de abril de 2023 16:03

Teherán rechaza la nueva resolución del CDHNU sobre la situación de los derechos humanos en Irán y alerta contra enfoques “selectivos y deliberados”.

“La República Islámica de Irán rechaza la presentación de la resolución sobre la situación de los derechos humanos en la 52.ª sesión del Consejo de Derechos Humanos (de las Naciones Unidas, CDHNU), pues se basa en un enfoque selectivo, deliberado, confrontativo, y fue preparada y aprobada con fines políticos”, ha señalado este martes el portavoz de la Cancillería de Irán, Naser Kanani, al condenar la prórroga del mandato del relator especial contra Irán.

El CDHNU aprobó esta misma jornada una resolución que extiende durante un año más el mandato del relator especial de la ONU en Irán, Javaid Rehman, para que siga monitoreando la situación en este país. La resolución reitera los infundios antiraníes en materia de derechos humanos, acusando a Teherán de actos de violencia contra mujeres.

Kanani, no obstante, ha denunciado que el documento incluye “prejuicios y juicios precipitados” y que su proyecto fue presentado por apoyo de algunos países occidentales con el fin de “minimizar el progreso de los derechos humanos” en el país persa.

Todo eso, ha proseguido, la “inválida (la resolución) por completo”. Dicha actitud “no terminará en nada mejor que la resolución en cuestión”, ha agregado.

 

De igual modo, ha avisado que algunos países miembros de la ONU instrumentalizan los mecanismos del organismo “para conseguir objetivos políticos”, advirtiendo contra “la evidente manipulación de los derechos humanos” por parte de dichas naciones.

“El Consejo de Derechos Humanos es el órgano principal de las Naciones Unidas para promover y apoyar los derechos humanos a la base de la cooperación y el diálogo y es un lugar para el discurso de los derechos humanos entre gobiernos, organizaciones no gubernamentales y otras partes beneficiarias. El uso instrumental y político de esta institución es el enfoque mediante el cual los países occidentales han debilitado la validez de sus decisiones y resoluciones”, ha remarcado.

Kanani, de igual modo, ha recalcado que “los países, que violan los derechos de otras naciones, no pueden proclamar ser demandantes o jueces sobre los derechos humanos, sino que deben rendir cuentas por los crímenes que cometen en violación grave y sistemática de los derechos humanos tanto en sus países como en otros países del mundo”.

En declaraciones formuladas antes de la votación de la resolución, el representante permanente de Irán ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza), Ali Bahreini, transmitió un “mensaje claro a los patrocinadores” de la misma:

“El pueblo de Irán eligió la autoestima y la independencia con su Revolución Islámica en 1357 (1977) y, a pesar de las inhumanas medidas coercitivas unilaterales y la manipulación de los medios, (los iraníes) se mantendrán firmes en ese camino al rechazar cualquier tipo de dominación y servidumbre”.

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