• Palestinos se reúnen en el recinto de Mezquita Al-Aqsa en una protesta contra régimen de Israel, 29 de abril de 2022. (Foto: Getty Images)
Publicada: martes, 3 de mayo de 2022 23:50

Embajadora palestina en Irán, Salam Zawawi, puso énfasis en que la ciudad de Al-Quds (Jerusalén) es la capital eterna de Palestina y no le renunciarán.

“La capital eterna de Palestina es Al-Quds, y nunca renunciaremos a nuestro derecho a establecer un Estado palestino independiente y soberana con Al-Quds como su capital”, dejó claro el martes Zawawi, en una entrevista concedida a la cadena iraní de Al-Alam,.

La diplomática palestina denunció la continua agresión del régimen de Israel en todo el territorio palestino, especialmente en Al-Quds, así como la Mezquita Al-Aqsa, sita en la misma ciudad.

Asimismo, enumeró algunas de atrocidades israelíes, entre ellas arrestos masivos, invasión de asentamientos con apoyo militar para atacar a fieles indefensos, ocupación de territorios palestinos, intentos de aislar Al-Aqsa y dividir los patios de la mezquita entre musulmanes y judíos.

 

“El régimen de ocupación israelí, con el apoyo de los colonos armados [...] ataca la Mezquita Al-Aqsa con el objetivo de implementar el plan de división temporal y espacial de la Mezquita de Aqsa”, reprochó, para luego asegurar que “esta declaración no puede ser negociada o argumentada de ninguna manera”.

Ante tal situación, la embajadora palestina destacó el fracaso de tales esfuerzos de Israel, gracias a la resistencia de la nación de Palestina, prometiendo que seguirán derrotando en el futuro.

Es más, Palestina ha urgido a la Organización de Naciones Unidas (ONU), el Consejo de Derechos Humanos o la Asamblea General de ONU (AGNU) a detener la “ocupación racista” de este régimen, lo que fue confirmado por Amnistía Internacional (AI) y Human Rights Watch (HRW), anunció Zawawi.

Refriéndose a las elecciones palestinas, la diplomática hizo hincapié en la necesidad de realizar comicios, mientras exigió a realizarlos en todo el territorio de Palestina, censurando la decisión de Israel de impedir su celebración en Al-Quds.

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