El ejército israelí reconoció recientemente haber matado al joven Muhamad Hosam Habali, de 22 años de edad, en la ciudad de Tulkarem (noreste de Palestina), pero afirmó que había sido en respuesta a “un violento motín en el que decenas de palestinos lanzaron piedras”.
Una vídeo emitido este lunes por un canal de televisión palestino contradice sin embargo esa versión de los hechos. Las imágenes muestran a Habali, que camina con ayuda de un bastón, de pie junto a un grupo de amigos, antes de que las tropas israelíes inicien un tiroteo a la entrada de un restaurante de la localidad.
El periodista Sami As-Sai, residente en Tulkarem, encontró las imágenes grabadas por cámaras de seguridad de la zona y ha explicado que unos soldados israelíes acababan de registrar una casa cuando vieron al grupo de jóvenes frente al establecimiento.
En el vídeo se ve además a una persona del grupo levantando un brazo, aparentemente amonestando a los soldados. Unos segundos después, Habali se desploma. Según As-Sai, las tropas israelíes le dispararon a una distancia de 80 metros.
La familia del joven, que vivía en un campo de refugiados de Tulkarem, ha explicado que el chico sufría discapacidades físicas y cognitivas y que solía desempeñar trabajos simples.
Desde diciembre del año pasado, cuando el presidente de EE.UU., Donald Trump, declaró la ciudad palestina de Al-Quds (Jerusalén) capital israelí, las fuerzas de ocupación han matado a 345 palestinos, según un recuento publicado el sábado por el Centro de Estudios de Asuntos Palestinos e Israelíes de Al-Quds.
El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), Zeid Raad al-Husein, ha advertido en reiteradas ocasiones al régimen israelí sobre el uso de fuerza letal durante los últimos choques con los palestinos, que se han saldado con decenas de muertos y miles de heridos.
myd/mla/mkh/rba