Los mexicanos se volcaron a las calles para ayudar a los damnificados del sismo del 19 de septiembre. Aportaron todo lo que pudieron, comida, agua, ropa y dinero. Pero no ha sido suficiente. El gobierno suma críticas por esta lenta respuesta y más porque solicitó a la ciudadanía que done insumos para quienes se vieron afectados.
Para legisladores, la petición de insumos a los ciudadanos, es discriminatoria, se pide a los que menos tienen y no a quienes se han beneficiado de la explotación de recursos naturales y concesiones.
Otra petición pública en redes sociales, es que lo partidos donen sus recursos para campañas políticas para los damnificados, pero no se puede. Los recursos destinados para los desastres, salen con lentitud desesperante de las arcas públicas, los mexicanos más ricos, donan poco mientras los más pobres, dan hasta lo que no tienen.
Hay otro tema controversial en estos tiempos aciagos en México. Los ex gobernadores acusados de malversar fondos públicos como Javier Duarte de Veracruz, César Duarte de Chihuahua y Roberto Borge de Quintana Roo. Muchos opinan que si regresan lo que se robaron, los damnificados tendrían menos problemas para recuperar lo perdido.
Arturo Calvillo, Ciudad de México.
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