Los dos túneles fueron descubiertos en las ciudades de Tijuana y Mexicali, ambas en el estado de Baja California (noroeste de México) y fronterizo con el estado norteamericano de California (suroeste).
Un vocero del Ejército mexicano afirmó que el primer túnel fue hallado en la ciudad de Mexicali, de donde los traficantes, con trajes de buceo, salían para llevar la droga, además, agregó, fueron encontrados varios trajes de buceo en Tijuana.
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