• El submarino británico de clase Vanguard.
Publicada: lunes, 2 de noviembre de 2015 2:29
Actualizada: martes, 3 de noviembre de 2015 3:30

El Partido Laborista de Escocia votó abrumadoramente el domingo en contra de la renovación del sistema de armas nucleares Trident del Reino Unido.

La votación anti-Trident, que se realizó en un 70 % de los distritos electorales de los laboristas y miembros sindicales, fortalecerá los esfuerzos del líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn, para presionar a los líderes de la cámara de Westminster, a que revisen su política de defensa pro-nuclear.

La líder de la formación laborista escocesa (SNP, por sus siglas en inglés), Kezia Dugdale, describió las armas nucleares como "una amenaza mortal para la supervivencia de la humanidad" y "masivamente caro", y también dijo que la renovación de Trident fomentaría la proliferación nuclear.

Así mismo, añadió que era inmoral gastar miles de millones de libras en este sistema en un momento en que la austeridad impera en el gasto público.

El movimiento, que refleja fielmente la política de Corbyn, será visto por sus partidarios como un respaldo valioso de su política unilateral de desarme, pero a su vez se subraya la protección de puestos de trabajo en el campo de defensa, ya que podría toparse con el poderoso sindicato de esta industria como también sufrir con los votos en las circunscripciones claves para esta formación.

El líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn.

 

La moción aprobada en esta jornada es clara en su oposición a las armas nucleares y puede que dicha postura enfurezca a los partidarios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) dentro del partido, pero no obstante probablemente puede reforzar sus intentos de atraer a los votantes de la izquierda lejana al partido laborista escocés.

Por otra parte, el secretario de Defensa del Reino Unido, Michael Fallon, dijo que la votación de la filial laborista escocesa representa un peligro para la seguridad nacional, y aseguró que Trident, fue crucial para la seguridad del Reino Unido, y además significa protección de miles de puestos de trabajo.

Recientemente, el nuevo líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn, sufrió su primera derrota interna, pues su formación rechazó abandonar el programa Trident de disuasión nuclear.

El Partido Conservador (PC), del primer ministro británico, David Cameron, quiere renovar la flota submarina nuclear, y los laboristas también firmaron una renovación del sistema Trident, pero el Partido Nacional Escocés, se opone radicalmente a la renovación de la flota.

La renovación del sistema Trident, consiste en un sistema de misiles nucleares a bordo de 4 submarinos de clase Vanguard. Al menos uno de los submarinos está siempre navegando con una capacidad de 40 misiles por embarcación. Este sistema está vigente desde 1994.

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