El parlamentario libanés Eihab Hamadeh, representante de alto rango de Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) y miembro destacado del bloque Lealtad a la Resistencia, reafirmó que las armas de Hezbolá seguirán siendo un pilar de defensa nacional.
En un discurso ofrecido el martes sobre la situación política y de seguridad del Líbano, Hamadeh subrayó que Hezbolá está dispuesto a acoger cualquier iniciativa que respete la soberanía de país árabe y garantice los derechos de su pueblo.
“La Resistencia nunca abandonará sus armas; este asunto solo podrá discutirse tras la plena implementación del alto el fuego y dentro de una estrategia nacional de defensa”, ratificó el legislador.
Indicó que el acuerdo de cese al fuego vigente desde hace más de un año no fue fruto de negociaciones diplomáticas, sino resultado del equilibrio de fuerzas impuesto al enemigo tras la batalla de Awli al-Baas. “Si el régimen sionista hubiera considerado fácil avanzar hacia Beirut, jamás habría dudado en continuar la guerra”, añadió.
El funcionario denunció además que Estados Unidos no ha cumplido ninguno de sus compromisos y que todo el Líbano, no solo una parte del país, se encuentra bajo la amenaza de las agresiones israelíes.
En este contexto, calificó de “vergonzosas y ridículas” las posturas del canciller libanés, Yussef Raji, contra la Resistencia y sus aliados, y exigió a Beirut que ponga fin a sus declaraciones. “Es lamentable que alguien con semejante actitud pretenda representar al Líbano en el Ministerio de Exteriores”, señaló.
Sus palabras se producen después de que el ministro Raji, en una entrevista con la cadena Al Jazeera, justificara las incursiones israelíes en territorio libanés y acusara a Hezbolá, lo que provocó indignación en amplios sectores del país.
El parlamentario sostuvo que Raji no representa ni siquiera a la mitad de los libaneses, pues sus posiciones reflejan rencor y desconocimiento de las relaciones y vínculos de gran parte de la población. Por su parte, Hassan Fadlallah, un parlamentario libanés del bloque Hezbolá, recordó que desde el Acuerdo de Taif de 1989 se reconoce el papel de la resistencia en la defensa del país, y que los intentos de desarme contradicen los compromisos históricos asumidos por el Estado libanés.
Desde su llegada al cargo, Raji ha adoptado un estilo de confrontación que, según Hamadeh, se aparta de las normas diplomáticas y constitucionales. En sintonía con medios israelíes, llegó incluso a advertir sobre supuestos planes del régimen de Tel Aviv para lanzar una operación militar a gran escala contra el Líbano.
Asimismo, reiteró sus ataques verbales contra Hezbolá, señalando que sus armas son “ineficaces” y de haber facilitado la ocupación israelí, mientras aseguraba que el Gobierno busca convencer al movimiento de entregar su arsenal.
Con estas declaraciones, Hezbolá reafirma que la Resistencia sigue siendo un factor esencial de estabilidad en el país y que no aceptará presiones externas para desarmarse.
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