Los manifestantes en el sur de Líbano tomaron las calles el miércoles contra la visita de un grupo diplomático de Estados Unidos, liderado por el enviado especial para Siria, Tom Barrack. Los indignados tenían en sus manos banderas del Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá) en sus manos y pancartas con grafitis que contenían mensajes como “Barack es un animal”.
En la ciudad de Tiro se realizó una vigilia multitudinaria a la que asistieron decenas de residentes de pueblos fronterizos y víctimas de la agresión israelí. Los indignados se concentraron en las rutas por donde iba a pasar la delegación estadounidense.
The reception awaiting U.S. envoy Tom Barrack in Al-Khiam, southern Lebanon: Hezbollah flags, posters with photos of Hezbollah militants killed in the fighting, and slogans painted on the road: “Barrack is a beast,” “America the Great Satan” – alongside a drawing of a Star of… pic.twitter.com/R0Yqt9oK7w
— GMan (Ґленн) ☘️🇬🇧🇺🇦🇺🇸🇵🇱🇮🇱🍊🌻 (@FAB87F) August 28, 2025
Los manifestantes condenaron la injerencia de Washington en los asuntos internos del Líbano y enfatizaron en el derecho de los libaneses a resistir ante la ocupación de su territorio por el régimen israelí y proteger su soberanía.
La indignación se desató luego de que el diplomático estadounidense dijera a un grupo de periodistas locales que debían “actuar de forma civilizada” y evitar comportamientos “animalísticos”, lo que fue percibido como un insulto directo al pueblo libanés.
