La cadena libanesa Al Mayadeen ha informado que el grupo ha atacado los puestos de avanzada del ejército israelí al menos 1013 veces entre el 8 de octubre y el 11 de febrero.
En un comunicado divulgado el domingo, Hezbolá anunció que sus combatientes habían atacado dispositivos de espionaje en el sitio israelí Ruwaisat al-Alam en las colinas de Kfar Chouba, así como en las granjas ocupadas de Shebaa, utilizando armas apropiadas para destruir los objetivos designados.
Las fuerzas de la Resistencia libanesa también atacaron una reunión de soldados israelíes en la región del triángulo de Al-Tayhat con una salva de misiles.
Más tarde en la misma jornada, los combatientes de Hezbolá dispararon misiles contra dispositivos de espionaje establecidos en el sitio de Al-Abbad y los destruyeron.
Además, apuntaron contra una concentración de las fuerzas israelíes en Jabal Nather con varios cohetes, dejando a varios soldados heridos.
Desde el inicio de la operación de represalia Tormenta de Al-Aqsa, lanzada por parte del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) el 7 de octubre, Hezbolá ha llevado a cabo intensas operaciones diarias contra los objetivos del régimen sionista en el norte de los territorios ocupados en apoyo al pueblo palestino en la Franja de Gaza y para reducir la presión sobre la Resistencia en Gaza.
En este sentido, los medios israelíes han admitido repetidamente que Hezbolá tiene la ventaja en el norte de los territorios palestinos ocupados y que el ejército israelí está atrapado en esta zona.
El régimen de Tel Aviv ha intensificado recientemente su agresión contra varias localidades del sur de El Líbano, en un intento de expandir la brutal guerra en el territorio palestino asediado a otros frentes de la región.
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