“Todos esperamos y creemos en la capacidad de nuestras naciones para resistir el plan sionista-saudí-estadounidense, el cual no tendrá otro destino que el fracaso”, dijo el sábado el jefe adjunto del Consejo Ejecutivo de Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), el sheij Nabil Qauq.
En declaraciones al portal libanés El Nashra, Qauq denunció, en concreto, las recientes matanzas de yemeníes, perpetradas por Arabia Saudí y sus aliados árabes, y dijo que el régimen de Riad ha convertido el Eid al-Fitr de los musulmanes en “una sangrienta masacre” en Yemen.
El triángulo Arabia Saudí-EE.UU.-Israel también actúa en el conflicto de Yemen, de hecho, las autoridades yemeníes han asegurado que Riad cuenta con el respaldo de Washington y el régimen israelí en su agresión brutal desde marzo de 2015 contra el país más pobre del mundo árabe.
Todos esperamos y creemos en la capacidad de nuestras naciones para resistir contra el plan sionista-saudí-estadounidense, el cual no tendrá otro destino que el fracaso”, dice el jefe adjunto del Consejo Ejecutivo de Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), el sheij Nabil Qauq.
Qauq, de igual modo, enfatizó que la dinastía de Al Saud sigue una política en línea con las tramas urdidas contra las naciones de la región, particularmente el pueblo palestino.
El movimiento libanés siempre ha sido un duro crítico de las políticas de Washington, Riad y el régimen de Tel Aviv y advertido de los planes de estos tres para desestabilizar la región.
En el caso de Palestina, las críticas de Hezbolá se han centrado en EE.UU. por haber anunciado un cambio en estatus de la ciudad palestina de Al-Quds (Jerusalén), a Israel por su ocupación ilegítima y a Arabia Saudí por facilitar y legitimar los referidos planes de Washington y el régimen de Tel Aviv.
Un análisis elaborado en abril alertó de una coordinada ofensiva militar, política, diplomática y comunicacional lanzada por la triada conformada por el imperialismo estadounidense, el sionismo y el wahabismo.
tqi/ctl/msf